espacioseuropeos.com (4/5/2010)
De acuerdo con las declaraciones de la diputada Rosa Díez, líder de UPyD, a la agencia de noticias Europa Press, así como la facilitada por algún otro medio de comunicación, el día 14 de abril, la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional emitió un auto por el que el preso Arnaldo Otegi iba a ser trasladado desde el centro penitenciario de Navalcarnero (Madrid) al de Martutene (San Sebastián).
El motivo del traslado -un permiso de tres días- era para visitar a su padre que se encontraba hospitalizado a causa de un infarto.
Rosa Díez, diputada de UPyD ha declarado a la agencia Europa Press, que ve «muy raro» tanto «cabo suelto» del Gobierno en relación con los etarras. Menciona Rosa Díez el caso de Iñaki de Juan Chaos, Rafael Díez Usabiaga o Josu Ternera que en los últimos días, por unas u otras causas, se encuentran en libertad. Rosa Díez considera que puede ser casualidad, pero «yo no creo en las casualidades», afirma.
Menciona la diputada de UPyD el caso de Iñaki de Rentería, acusado de atentar contra el Rey, y que acaba de ser puesto en libertad por «algún error procedimental»; otro caso es el de Iñaki de Juana Chaos, en la actualidad en paradero desconocido desde que hace ya varios días abandonó Belfast; y por último, de momento, Rafael Díez Usabiaga, al que el juez Baltasar Garzón ha «soltado» -según la diputada de UPyD- para que cuide a su madre.
Opina Rosa Díez que otro caso es el de Josu Ternera, en paradero desconocido sin que España haya cursado «la orden europea de detención y entrega». La diputada manif
iesta que todo se puede deber a una coincidencia, pero también a la «necesidad» del Gobierno de «encontrar un argumento» para poder mostrar a los españoles «alguna buena noticia, como que los batasunos en libertad hacen un gesto de desmarque de la banda».
Los indicios de estas «liberaciones» nos conducen a pensar que el gobierno español se encuentra otra vez metido de hoz y coz en plena negociación con ETA. Un acuerdo con ETA, aunque fuera de mínimos, le vendría muy bien a Zapatero en estos momentos en los que su imagen está por los suelos y las encuestas no le auguran un porvenir político brillante.