Oscar Riaño (4/5/2010)
El hermetismo y la burocracia en ciertas dependencias culturales del Ayuntamiento de Madrid llega a límites insospechados, como podrá colegirse del caso sufrido y que, a continuación se refleja con toda brevedad.
Se trataba de confirmar si, en octubre de 2005, se había realizado efectivamente una exposición dedicada a un célebre dibujante español del siglo XIX, Daniel Urrabieta Vierge, más conocido en Francia que en España por haber residido en París la mayor parte de su vida.
Después de numerosas llamadas a teléfonos del Centro Cultural Conde Duque, donde habría tenido lugar la exposición, y de largas esperas, auricular en mano, por consultas de los correspondientes funcionarios municipales, el veredicto final fue el siguiente: «Tiene usted que hacer la consulta por escrito en la Junta Municipal de su distrito». Y claro está -deduzco- esperar semanas, meses o ad kalendas graecas…El maestro de periodistas, Mariano José de Larra, ante esta versión ampliada del «Vuelva usted mañana», volvería a suicidarse sin necesidad de contrariedades amorosas ¡Le bastaría con la insoportable política burocrática de Gallardón!
Ante tales trabas, cualquiera desiste por aburrimiento o desesperación.