España/ONU
Carlos Ruiz Miguel (28/6/2011)
Moratinos, el ex-ministro de Exteriores español ha fracasado en su candidatura a presidir la FAO. Pero sería un error considerar esto sólo como un fracaso personal suyo. Es algo más, mucho más, grave: es un fracaso del actual gobierno socialista. Un fracaso que ha supuesto un coste económico y político muy alto para nuestra economía. Y un fracaso que pone de manifiesto también que el Gobierno toma sus decisiones políticas sin un mínimo criterio de racionalidad y que la Radio Televisión Española está gravemente enfeudada al Gobierno. Ahora la pregunta es qué destino le va a dar el presidente Rodríguez Zapatero a su ex-ministro. Y la reflexión es ¿qué ocurriría si todos estos medios se pusiesen al servicio de los intereses nacionales de España?
I. LA PRESIDENCIA DE LA FAO: ¿QUIEN HA TOMADO LA DECISIÓN DE ENFRENTARSE CON BRASIL?
Hace tiempo que se conoce que Brasil había decidido presentar un candidato a la presidencia de la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación). El candidato, José Graziano Da Silva, era una persona que tenía un curriculum específico verdaderamente notable: sacó del hambre a más de 20 millones de personas siendo ministro en Brasil. Y, por si fuera poco, era un candidato apoyado por un país, Brasil, y por un líder, Lula da Silva que se encuentran en el momento de mayor prestigio internacional de toda su historia.
Por contra, Moratinos, en el sector de la alimentación sólo puede presumir de ser entendido en vino de Burdeos, lo que por cierto suscitó la airada reacción de los productores de vinos españoles.
Siendo esto cierto, la pregunta es: ¿quien ha tomado la decisión de enfrentarse con Brasil?
Una primera hipótesis, insuficiente, es que hubiera sido el propio Moratinos.
Ciertamente, podría haber querido el puesto, pero aunque él hubiera sugerido al gobierno ese deseo, el Gobierno le podría haber dicho que no era posible.
Por eso parece más razonable pensar que la decisión se ha tomado por el Gobierno. Y más específicamente, por su actual presidente, José Luis Rodríguez.
Es importante saber quien ha tomado la decisión porque el decisor será quien deba responder del fiasco. Porque lo normal, en un gobierno y una administración mínimamente serios, es que se le hubiera dicho que, teniendo a Brasil enfrente era una locura enfrentarse. Una de dos: o se retiraba la candidatura para no enfrentarse a un país y un candidato especialmente fuertes… o se pactaba con Brasil. Se podría haber llegado a pactar con Brasil que éste país retirase su candidato a cambio de algo.
No se hizo ni una cosa ni otra.
Y es importante saber si el futuro candidato del PSOE, Pérez Rubalcaba, se opuso a esta aventura.
El resultado ha sido el fracaso. Uno más de los muchos que jalonan el gobierno Rodríguez. Basta recordar en este sentido, por su semejanza, el fracaso que supuso para el gobierno Rodríguez intentar presentar como presidenta de la OMS (Organización Mundial de la Salud) a Elena Salgado, la actual ministra de Economía.
Qué diferencia con lo ocurrido en el año 2005 cuando el gobierno español dejó totalmente abandonado a un gran jurista español, Julio D. González Campos, que compitió por formar parte del Tribunal Internacional de Justicia (TIJ). Sin ningún apoyo del Gobierno, González Campos perdió, sí, pero con un resultado bastante digno que hace pensar que si el gobierno le hubiera apoyado un poco, sólo un poco, podría haber sido elegido juez del TIJ.
II. EL COSTE ECONÓMICO Y POLÍTICO DE LA CANDIDATURA DE MORATINOS
La decisión, demencial, de presentar la candidatura de Moratinos enfrentándose a Brasil ha tenido y va a tener un coste económico y político muy grande. Un coste del que debe responder quien haya tomado la decisión.
El País, nos dice que el Gobierno ha puesto a disposición de la candidatura de Moratinos «tres diplomáticos, una secretaria y un funcionario de Agricultura; así como un Falcon del Grupo 45 de la Fuerza Aérea para algunos desplazamientos».
El Semanal Digital nos aclara lo que significa en realidad la expresión «algunos desplazamientos»: «En los últimos cinco meses Moratinos viajó a 90 países». Curioso: Moratinos obtuvo 88 votos (incluido, supongo, el de España y el de Andorra a donde no debió viajar en avión).
Al margen del coste de los viajes, convendría que supiéramos si se han utilizado fondos reservados para comprar votos de algunos Estados. Y, si fue así, cuanto dinero nos ha costado esta inútil compra de votos.
Por si fuera poco, la prensa nos informa del séquito que ha viajado (a nuestra costa) para apoyar a Moratinos:
Admitamos que la ministra de Agricultura y la de Exteriores puedan tener justificación para su viaje a Roma. Pero: ¿por qué los españoles hemos tenido que pagar el viaje (otro más) a María Teresa Fernández de la Vega?
¿Cuál ha sido el coste total de esta aventura política que sólo una mente ignorante de realidad política ha podido emprender?
¿Van a exigirse responsabilidades por el despilfarro? Estoy esperando que los que protestaban por el coste de las gestiones en USA para que el Congreso diera una medalla a Aznar protesten ahora. Y lo que es más: estoy esperando que comparen el coste de las gestiones del asunto de la medalla y el coste de esta aventura. Con una diferencia claro: entonces España crecía y ahora atraviesa la mayor crisis económica de los últimos decenios.
Pero si el coste económico es brutal, el coste político es, y puede ser, aún mayor. Y es que el Gobierno socialista no sólo se ha equivocado al competir por el puesto. Es que, además, no ha sabido perder. Europa Press dice:
Tras la primera ronda, se ha dado la circunstancia de que la candidatura de Brasil ha pedido una recesión de media hora a la Presidencia de la Mesa para reunirse con los 77 países no alineados, lo que ha provocado un manifiesto malestar entre las filas de la candidatura española. En este sentido, fuentes del Gobierno español a Europa Press, ésa recesión de media hora es «ilegal» porque la presidencia de la Asamblea «no puede permitir una suspensión de la reunión general durante una votación».
No creo que a Brasil y al nuevo presidente les vaya a gustar mucho que el Gobierno Español diga que Graciano da Silva ha ganado «ilegalmente».
III. EL RIDÍCULO DE RADIO-TELEVISIÓN ESPAÑOLA
La demencial aventura de competir por la presidencia de la FAO ha servido, también, para revelar la penosa situación profesional de Radio Televisión Española.
En su página web, en la sección «Telediario 1 en cuatro minutos fin de semana 26/06/2011» se ha dicho:
IV. EL DESTINO DE MORATINOS
¿Qué va a ocurrir con Moratinos?
En este blog hemos tratado muchas veces sobre él.
El 10 de febrero de 2010 yo escribí en este blog:
(…)
Todo parece indicar que Haidar se ha cobrado la cabeza de Moratinos
En junio medios franco-marroquíes anunciaron, antes de su destitución, que Moratinos iba a ser nombrado Embajador en Marruecos. Yo me hice eco de esas voces.
Por las mismas fechas, un bloguero de Periodista Digital, apuntaba que iba a ser nombrado Embajador en el Vaticano.
Es obvio que esos medios y periodistas se equivocaron. Por cierto, que yo sepa, ninguno de ellos luego reconoció su error.
El fracaso del gobierno Rodríguez en la FAO nos vuelve a llevar a la pregunta: ¿qué destino tiene Moratinos?
Dado que Moratinos presume de ser un gran conocedor del mundo árabe, un posible puesto para él podría ser el de cónsul en Jerusalén. En un momento en que se va a discutir en la Asamblea General de la ONU la proclamación del Estado palestino, podría demostrar ahí sus verdaderas capacidades.
Claro, que otra posibilidad es que, ante esa Asamblea General, vaya a ser nombrado Embajador de España en Naciones Unidas.
CODA
¿Se imaginan que los medios que el Gobierno español ha puesto al servicio de la candidatura de Moratinos a la FAO los hubiera puesto para solucionar el conflicto del Sáhara Occidental (territorio del que España es potencia administradora)?
N. de la R.
Este artículo se publica con la autorización de Carlos Ruiz Miguel, Catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Santiago de Compostela, que también se puede ver en Desde el Atlántico.