Sin Acritud…
Carlos Ruiz Miguel (23/9/2011)
El estado de Georgia acaba de ejecutar, el 21 de septiembre a Troy Davis. Una persona acusada de un asesinato y condenada a la pena de muerte en un proceso con numerosas irregularidades. Son, precisamente, estas irregularidades las que explican la extraordinaria movilización internacional producida para intentar impedir su ejecución.El actual presidente del Gobierno español, Rodríguez Zapatero, en dos ocasiones reclamó en la ONU la «abolición» o la «moratoria» de la pena de muerte. Pregunta: ¿ha hecho alguna gestión Rodríguez en favor de Troy Davis?
I. EL CASO TROY DAVIS
Amnesty International nos informa que Troy Davis fue condenado a muerte en un juicio con varias irregularidades:
– Los testigos de cargo contra él tuvieron contradicciones en sus testimonios;
– varios testigos de cargo que depusieron contra él en el juicio de su condena, se han desdicho, en declaraciones juradas, de su testimonio incriminante, declarando que lo emitieron bajo presión;
– uno de los testigos que no cambiaron su testimonio contra Davis es el otro principal sospechoso, contra el que han aparecido ciertas pruebas sobre su posible autoría del crimen.
A pesar de todo esto, a pesar de los cientos de miles de firmas reunidos para pedir que no se ejecutara a Davis, esta persona fue ejecutada. Su estado de ánimo era de paz.
II. RODRÍGUEZ FINGE ESTAR CONTRA LA PENA DE MUERTE
La insoportable levedad internacional del presidente Rodríguez tenía que ser disimulada.
Al principio, con la inane «alianza de civilizaciones».
Luego, cuando ya comenzó su decadencia (de Rodríguez y de la citada «alianza») blandió una supuesta «lucha» contra la pena de muerte.
– Primero escenificó esa «lucha» ante la Asamblea General de Naciones Unidas, en Nueva York, hace ahora tres años, el 26 de septiembre de 2008.
– Luego, ha seguido escenificando esa «lucha» el 24 de febrero de 2010, en el Palacio de las Naciones de Ginebra, en la sala de la «alianza de civilizaciones», Rodríguez solicitó.
III. SILENCIO DE RODRÍGUEZ SOBRE EL CASO DE TROY DAVIS
Llama la atención que Rodríguez, autoerigido en paladín universal contra la pena de muerte, haya guardado un absoluto silencio sobre el caso de Troy Davis, que es el caso que más eco ha tenido en la opinión pública mundial en los últimos años.
El silencio público de Rodríguez sobre este caso  es un dato objetivo.
Pero Rodríguez podía no sólo hablar en público. También podía hacer gestiones discretas.
La pregunta que debe hacerse es:
¿Ha hecho Rodríguez alguna gestión ante las autoridades de Georgia para detener la ejecución de Davis?
Tenemos derecho a conocer la respuesta para saber si Rodríguez es un farsante que ha utilizado la causa de la lucha contra la pena de muerte para hacerse propaganda.
El asunto es demasiado serio como para que Rodríguez no conteste a esto.
N. de la R.
Este artículo, que pueden ver en Desde el Atlántico, se publica con la autorización de su autor, Carlos Ruiz Miguel, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Santiago de Compostela.
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