Mallorca (España)
José Manuel G. Torga (22/12/2011)air-berlin
Por primera vez la línea aérea Air Berlín ha preparado un avión navideño con el exterior del fuselaje pintado a tal efecto. Salió para su ruta festiva  desde Helsinki y ha realizado una de sus escalas en el aeropuerto de Palma de Mallorca. Se trata de un Boeing 737-800, para cuya llegada habían sido seleccionados algunos estudiantes del primer y del segundo curso del Eurocampus a los que obsequiaron el barbado Papa Noel y una colaboradora (representaría a la señora Claus, de la leyenda moderna que trasladó al norte helado al obispo cristiano de Anatolia, Nicolás, con efectos añadidos de «marketing»).

Habíamos sido convocados también periodistas de Mallorca, de la Península y de Alemania; compartimos el brindis festivo y, como plato fuerte, nos mostraron el entrebastidores del Punto de Conexión de Vuelos (en el inglés de la aeronáutica, «Hub Control Center» y, abreviando, simplemente el  «hub». Aquí, las tripulaciones obtienen los datos necesarios y planifican los vuelos, para lo que disponen de los elementos técnicos necesarios.

Quinta compañía aérea europea
Llevaba la voz cantante en la visita de Prensa, como políglota consumado con un uso perfecto del español, el director general de Air Berlín para España y Portugal, Álvaro Middelmann Blome, secundado por el subdirector Pablo Caspers, y con la colaboración de Alexandra Bakir, desplazada desde la capital alemana.

Air Berlín es la segunda compañía aérea de Alemania. Cuenta con 9.200 empleados y su flota se compone de 170 aviones, con una media de edad de cinco años; vuela a 171 destinos en 45 países. En 2010 transportó 33,6 millones de pasajeros. Con más de tres decenios de existencia, ocupa la quinta posición en cuanto a las cifras del tráfico aéreo europeo.

Liderazgo de mercado
Por lo que se refiere al aeropuerto mallorquín, Air Berlín ostenta, desde hace más de ocho años, el liderazgo de mercado. Por lo mismo ocupa  la posición preponderante con respecto al Punto de Conexión de Vuelos. Hay que tener en cuenta que su programa de vuelos para el invierno 2011/12 desde Palma de Mallorca alcanza a 58 destinos en todo el mundo, que, como  los enlaces se organizan desde ahí.

Esta compañía alemana dice abogar  por un diálogo más fluido con los organismos españoles encargados de la gestión del turismo para afrontar, de modo convergente, los problemas relacionados con la temporalidad.

El idioma español sigue a bordo
Por cierto, habrá lectores de espacioseuropeos.com  que recuerden la noticia, de junio de 2008 cuando, desde la Dirección General de Política Lingüística del Gobierno balear, se trató de que Air Berlín introdujera el catalán -no ya el mallorquín- en relación con los viajeros durante los vuelos a la isla. Álvaro Midelmann resistió la presión, argumentando que el español es la lengua principal de toda la nación. Contó, además, con el respaldo del propio presidente de la compañía aérea, Joachim Hunold que, en la revista empresarial «Air Berlin Magazin», denunció que el idioma castellano se está convirtiendo en las Islas en «una lengua extranjera más». Gracias a la resistencia gallarda de estos alemanes, que dialogaron e hicieron valer sus razones, la tensión pasó y la vigencia del español se mantiene por parte del personal aéreo a bordo de sus aviones.