Guinea Ecuatorial
Abaha (6/6/2011)obiang-nguema-en-el-ano-juridico
La subsecretaria adjunta del Departamento de Estado para Asuntos de África, Susan D. Page, llegó la semana pasada a Malabo portando otra, la enésima, hoja de ruta, para que todos -sátrapa y acólitos- la cumplan a rajatabla. Hay que aclarar que muchos de esos acólitos viven en España, y algunos -otrora opositores- hartos del malvivir y de la persecución que padecen en España, se han dejado convencer de que hay que ir a Guinea Ecuatorial y desde allí hacer lo que hay que hacer.

Es la cantinela de siempre. Y algunos se la creen de buena fe. Con un cierto crujir de tripas se han acercado a la embajada del dictador en Madrid, en cuya sede -despacho del embajador o secretaria-prima-Vicky-  han dialogado sobre lo que hay que dialogar. ¿Posibilidades?  Las conversaciones que, a buen seguro, algún día no muy lejano, las conoceremos. Y decimos, co-no-ce-re-mos… ¿De acuerdo?

Los billetes de avión están ya a punto, de momento dos o tres. Alguno tiene que amarrar su chollo-laboral en la Madre Patria, pero otros a dos velas, se aprestan a dar la batalla desde Malabo o Bata.  Los que ansían el poder, quizás lo encuentren, pero no les durará mucho. Los otros, los que van de buena fe, tendrán un fin similar al de los primeros.

¡No hay que creerse es película! ¡Nadie debe volver hasta que se puedan celebrar unas elecciones presidenciales y legislativas en plena libertad! Con el añadido de que hay que resolver cuentas pendientes. O, ¿acaso no se van a pedir responsabilidades por las atrocidades cometidas?

Los que no obren así, en el futuro el pueblo se lo demandará…

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