Una defensa equivocada
España
Diego Camacho (11/2/2014)
Un sábado frío y lluvioso de febrero fue la Infanta a declarar como imputada a los juzgados de Palma de Mallorca. Como era de esperar, la Casa Real ha optado por articular una defensa equivocada de la hija del Rey. Ante el saqueo delictivo de las arcas públicas, del que ella es la principal responsable, solo cabía una actitud para estar a la altura de su título de Alteza Real: afrontar la responsabilidad de sus actos devolviendo todo el dinero al Tesoro, renunciar al ducado de Palma e iniciar una nueva vida fuera de España con el apoyo de su padre y hermano.
En su lugar se ha optado por hacer que prevalezca el privilegio, aunque ello signifique la quiebra definitiva del Estado de Derecho. Ha sido penoso ver como han actuado unos cortesanos sin cuya complicidad no hubiera