EEUU y nuestra América
Internacional
Pedro Godoy P. (14/8/2015)
La emancipación de los enclaves británicos de Norteamérica constituye un estímulo para nuestra Independencia. También es aguijón para conservar la unidad. El talento de Jorge Washington, Tomás Jefferson, Benjamín Franklin o Alejandro Hamilton es vincularlos en un solo cuerpo político. La fórmula federativa es empleada para asegurar la vertebración. Se evita así el surgimiento de varias microsoberanías raquíticas y, ya en la infancia, el Coloso del Norte asegura pletórica madurez. El dólar yanqui posee como lema en latín: «de varios, uno».
¿Qué ocurrió acá en Suramérica con los cuatro virreinatos? Pareciera que los sucesos peninsulares -invasión de Bonaparte– apresuran un separatismo que malogra el proceso. De allí las ácidas tipificaciones de la emancipación como «parto prematuro» o «aborto histórico» al cual se hizo ya referencia. La voluntad de aglutinamiento de los libertadores resultó inferior al dinamismo de los agentes disolventes representados por las elites lugareñas. Se puede expresar -a titulo de tentativa explicación- la fuerza centrípeta queda anulada por la centrifuga. (más…)