B. P. (14/3/2008)

Aunque el PP ha aumentado el número de votos y escaños, está claro que ha perdido estas elecciones generales. En la calle Génova todos los ojos se vuelven ahora contra Eduardo Zaplana y Ángel Acebes, como queriendo echar sobre sus espaldas la culpa de los resultados electorales.

Zaplana ha presentado su dimisión a Mariano Rajoy de todos los cargos y responsabilidades, tanto en el Congreso de los Diputados, como en el partido. Quiere ser, simplemente, un diputado de base. Con certeza no se sabe si ha sido una decisión tomada por él mismo, o inducida por el amiente que se respiraba a su alrededor.

Tras Zaplana, la próxima víctima puede ser Ángel Acebes. Así, de esta forma el campo queda un poco más trillado para Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz-Gallardón. Los dos piensan que Rajoy no va a aguantar las críticas que, como «malas hierbas», crecen a su alrededor.

La Cadena Cope y el diario El Mundo, han comenzado desde el mismo día 10 de este mes, a fustigar a Mariano Rajoy y su equipo.  Pero se olvidan, en esas críticas, de mencionar a Manuel Pizarro, número dos de la lista de Madrid, que ha resultado ser un auténtico «tigre de papel» en esto de la política de calle. El debate con Solbes así lo demostró.

No obstante, todo parece indicar que Rajoy apostará  por Soraya Sáenz de Santamaría, Pio García Escudero, Gabriel Elorriaga, Juan Costa y Gustavo de Arístegui, entre otros. Con esta selección, que huele a moqueta y colonia cara, nada mejor para hundirse.

Uno de los personajes que, sin duda, ha llevado a esta derrota a Mariano Rajoy ha sido Pedro Arriola. Pero mucho nos tememos que continuará con él. Arriola sabe mucho del PP, aunque muchos del PP saben mucho de él, sobre todo los de la «hornada» anterior.

Lo de la «niña» de Rajoy nos recuerda a la «manzana con el gusano», campaña electoral con la que contribuyó a hundir al partido de Adolfo Suárez (UCD) en Andalucía. Por no acudir a la memoria y mencionar el desaguisado de otra campaña de la marca Arriola, en la que dio consejas (siempre bien pagadas) sobre la opción que la CEOE y Alianza Popular debían tomar en la campaña sobre el Sí o el No a la entrada de España en la OTAN.

En algunos cenáculos se comenta que Pedro Arriola podría estar ahora trabajando para Alberto Ruiz-Gallardón.

Tu mismo Mariano