espacioseuropeos.com (2/5/2008)

El nuevo Relator Especial de las Naciones Unidas para el Derecho a la Alimentación, Jean Ziegler, informó acerca de la urgencia de suspender la producción de biocombustibles, ya que según su informe «son la principal causa de la crisis alimentaria que ha sumergido a millones de personas en la pobreza».

Jean Ziegler, profesor de Sociología, fue miembro del parlamento federal de Suiza desde los años 1981 a 1999, es un experto en asuntos relacionados con el narcotráfico y blanqueo de capitales, temas sobre los que ha escruto varios volúmenes.

«Los agrocombustibles son, actualmente, los métodos de producción más criminales contra gran parte de la humanidad. Son un crimen intolerable, y solicité a la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York y en mi último informe al Consejo de Derechos Humanos, una moratoria, una prohibición total de cinco años a esta transformación», ha declarado el ex diputado suizo.

Según el informe de Ziegler, Estados Unidos ha quemado 138 millones de toneladas de maíz en 2007, para transformarlas en bioetanol y biodiesel.  Quemar alimentos, según Ziegler, para que sirvan a la movilidad de los países ricos, «es un crimen contra la humanidad».

Estas declaraciones las hizo el Relator Especial de las Naciones Unidas para el Derecho a la Alimentación, en las fechas en las que la ONU celebraba una cumbre de emergencia en Suiza para buscar soluciones ante la crisis mundial de alimentos.