espacioseuropeos.com (2/1/2009)
En un comunicado de prensa, con motivo de la entrada del nuevo año, Aquilino Nguema Ona Nchama, Secretario General de la UDDS (Unión para el Desarrollo Democrático y Social de Guinea Ecuatorial), anima a los guineanos a unirse para acabar con la dictadura de Teodoro Obiang Nguema por «todos los medios».
Tras felicitar a todos los guineanos, con motivo de estas fiestas, el secretario general de UDDS pide a sus compatriotas que se levanten «como un solo hombre para acabar con la dictadura en nuestro país por todos los medios. La libertad no tiene precio».
Aquilino Nguema manifiesta que 2008 ha sido para su partido un año «de solidaridad con todas las victimas de dicha dictadura, un aňo que ha reconfirmado a nuestro partido en el campo de los incorruptibles contra la dictadura de Teodoro Obiang Nguema (…) El Dictador, en su lógica de mantenerse en el poder contra la voluntad de todos los guineoecuatorianos no ha escatimado ningún esfuerzo para eliminar a los militantes de la libertad, democracia y respeto de los derechos humanos en nuestro país».
UDDS se dirige a los «compatriotas que han sufrido de carne y hueso encarcelamientos, torturas, detenciones arbitrarias, amenazas de muerte», reiterando su apoyo incondicional a la vez que les alienta a «seguir con la lucha porque el fin de la dictadura esta muy cerca y no debemos bajar la guardia».
No olvida Aquilino Nguema al «secuestrado en Yaoundé, Coronel Cipriano Nguema Mba, y el recién liberado Weja Chicampo Puye, así 
como a los confinados Felipe Ondo Obiang, Guillermo Nguema Ela y a todos los presos políticos que siguen en las siniestras cárceles de Guinea Ecuatorial. La UDDS -continúa el comunicado- os brinda todo su apoyo y solidaridad y vuelve a exigir incondicionalmente la liberación de todos los presos políticos, una amnistía general para el retorno de todos los exiliados a fin de consensuar entre todos un marco pacífico para la democratización de nuestro país».
Una vez más, UDDS pide a España, USA, Francia, y «a todos los países de la CEMAC y a la Comunidad internacional una ingerencia democrática a muy corto plazo para evitar situaciones incontrolables en nuestro país».