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(3/5/2009)hernandez-molto
El Fondo Monetario Internacional (FMI), alerta sobre la precaria solvencia de bancos y cajas de ahorros españole, así como sobre sus «potenciales necesidades de capital adicional«.

Del estudio (test) FMI ha realizado sobre un total de 53 entidades financieras, aproximadamente 20 de ellas pueden tener necesidades de capital adicional para poder seguir operando.

El Gobierno de España calcula que entre 30.000 y 50.000 millones de euros se van a necesitar para dotar al fondo de rescate de la banca, cantidad muy superior a la estimada por el FMI, que la cifra en poco más de 3.000 millones.

La diferencia es tan grande, según Expansión, porque «la iniciativa del Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero busca reactivar el flujo del crédito con un paquete de medidas muy amplias, en el que las inyecciones de capital directas a la banca no tienen por qué absorber el grueso de proyecto».

En este contexto, la Vicepresidenta Primera, María Teresa Fernández de la Vega confirmó días atrás que el Gobierno y el PP «ultiman un fondo para las cajas de ahorros«.

Los escandalosos beneficios de la banca y las altísimas retribuciones por varios conceptos de sus consejeros y ejecutivos, aparte de su mala gestión, son las verdaderas causas de la actual situación.  No excluimos, por supuesto, a las Cajas de Ahorros, donde los Consejos, integrados por «representantes sociales» (políticos y sindicalistas), hacen y deshacen a su antojo, sin control.

Así, por ejemplo, las retribuciones de la alta dirección de CCM  (Caja Castilla La Mancha), casi se duplicó en tan sólo tres años. El presidente de CCM, el socialista Juan Pedro Hernácaja-castilla-la-manchandez Moltó, dejó de publicar su suculento sueldo en el año 2007, después de subírselo al doble ese mismo año.

Entre 2004 y 2007, los sueldos de la alta dirección y Consejo de Administración de Caja Castilla La Mancha subieron de 1,06 a 1,94 millones de euros al año, lo que equivale a un incremento de un 83 por ciento.

Sin embargo, los salarios de CCM no son los habituales en el sector, ya que en la mayoría de bancos y cajas es normal percibir casi el doble.

En todos los casos, existen otros complementos como es la representación en filiales, y gabelas de otro tipo. No contamos aquí, la «capacidad» que tienen esos cargos para «apoyar» y conceder créditos.

Antes de aplicar ningún «plan rescate» con el dinero de los españoles, mejor sería que el Gobierno de España, auditara todas las Cajas de Ahorros -los bancos son entidades privadas-, y se procediera en consecuencia. Por otro lado, es necesaria una urgente regulación de su estatus, pero en cualquier caso hay que despolitizarlas.