J.M.G.T. (4/2/2010)vicente-alvarez-areces
La tribuna de Nueva Economía Fórum correspondía en esta ocasión  al presidente del Principado de Asturias, Vicente Álvarez Areces. Ejercía de presentador, el presidente de la Fundación Príncipe de Asturias, Matías Rodríguez Inciarte. Indicó algunos datos sobre el ponente: gijonés, nacido en 1943, licenciado en Ciencias Matemáticas, perito industrial y profesor de Estadística; en su trayectoria política ha sido alcalde de Gijón y, desde 1999,  presidente del Principado de Asturias. Rodríguez Inciarte dejó caer que gobernar Asturias es difícil; pero que hoy resiste la crisis económica mejor que otras comunidades.

Abrió su intervención Álvarez Areces con una serie de consideraciones sobre la realidad europea, aprovechando el semestre español en la presidencia rotativa. Con banalidades como «necesitamos acciones coordinadas en el ámbito europeo», al menos parte del auditorio rebajó su nivel de interés inicial.

Al fin pasó a hablar de Asturias. Reconoció que está considerado como un optimista y que lo es. Efectivamente, ejerció de tal y, además, lo justificó: «Tenemos que generar confianza». Esa premisa, para cualquier público que quiera partir de realidades, ya potencia el escepticismo. Recordemos que la revista de humor La Codorniz, tenía por lema «Donde no hay publicidad, resplandece la verdad».

Si, a mayor abundamiento, se enarbola el tópico de que las crisis nos golpean, pero son una oportunidad, no queda más remedio que apostillar. Sí, lo que pasa es que golpea a millones de trabajadores que van al paro y otros muchos que la padecen y es una oportunidad para unos pocos (sin entrar en señalar más).

El presidente Álvarez Areces habló del crecimiento en Asturias del PIB per capita, de la mayor iniciativa empresarial, de la innovación, del aumento de  las exportaciones,  de obras tan importantes como las del puerto gijonés de El Musel y de otros aspectos favorables. Uno se alegra, entre otras cosas por tener raíces asturianas. Pero la sensación de que el político vendía una parte de humo, aderezado con algunos datos de su vertiente de estadístico, no resultaba fácil superarla, dado que con la estadística se pueden hacer juegos malabares.

En el coloquio, le preguntaron si Joaquín Almunia, como Comisario Europeo puede tener el encargo de acaba con las ayudas  al carbón. Contestó que no creía que tuviera ese encargo. Que el mix energético español necesitará del carbón durante muchos años. Y que el carbón sigue teniendo presencia en Europa, en USA y en China, por ejemplo. Esto lo suscribe, sintiéndose mucho más de acuerdo, este testigo periodístico de la sesión informativa.

Uno supone, por otra parte, que el presidente Álvarez Areces tendrá días mejores.