Alejandra Durrell (3/5/2010)
Francisco Camps, presidente de la Comunidad de Valencia, no se presentará a la reelección como presidente de la comunidad valenciana. El caso Gürtel, aunque sólo sea por algunos regalos de sastrería, le salpica. Que sepamos, casi todas las consejerías del presidente Camps se encuentran, supuestamente, afectadas por este caso de corrupción. Casi todas esas consejerías han amañado contratos con la trama Gürtel.
El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), en un detallado informe, revela varias irregularidades en las contrataciones que se llevaban a cabo en la práctica totalidad de las consellerías valencianas. De acuerdo con un informe de la Policía Nacional, incluido en el sumario, revela que todas las consellerías del gobierno de la Comunidad de Valencia «amañaban por sistema» los contratos que firmaban con la trama. Una de las prácticas más habituales era la de fraccionar los contratos para así poder firmarlos sin sacarlos a concurso. Por otro lado, esta es una práctica muy habitual en las administraciones.
Entre 2005 y 2009, de los casi 90 contratos que analizó la policía, la mayoría habían sido fraccionados, procedimiento que vulnera el principio de publicidad y concurrencia, entre otros. El mismo informe policial alude a que la empresa Orange Market llegó a cobrar por trabajos que no se realizaron.
Varios de esos contratos lo son de trabajos en Fitur. El procedimiento empleado consiste en que los contratos fraccionados lo eran con la misma empresa; en otros casos, los trabajos contratados nunca se llevaban a efecto; en otros, se pagaba el mismo trabajo más de una vez.
No es ninguna casualidad que las empresas beneficiadas por estas y otras prácticas estén relacionadas con la trama Gürtel: Orange Market, Special Events y Diseño Asimétrico.
El informe que recoge estos procedimientos nada ortodoxos fue conocido durante la última sesión de control de las Corts al presidente de la Generalitat, Francisco Camps. A pesar de todo, Camps se acoge a los informes de la Sindicatura de Comptes y el Tribunal de Cuentas que, como es preceptivo, fiscaliza la gestión administrativa del gobierno valenciano, sin haber detectado irregularidad alguna.
Rita Barberá tira sus bolsos por la ventan
No es difícil pronosticar que tal y como están las cosas de la corrupción, PP y PSOE lleguen a un pacto de silencio -ya cas rubricado- de «uno por uno». Vosotros sacáis a Camps y nosotros a Pepe (José Bono).
En Valencia, la salida de Camps es más que u
n rumor. Hace unos días, la alcaldesa de Valencia Rita Barberá dijo: «El tema de relevar al señor Camps no existe, no se ha planteado, porque es el mejor President y el mejor candidato para ganar las elecciones»
El relevó de Camps no está en marcha según la alcaldesa del PP, pero lo cierto es que se habla de algunas reuniones y conversaciones telefónicas entre Barberá y dirigentes de su partido. El tema único es la sucesión de Camps, aunque todos lo nieguen.
La alcaldesa de Valencia ha dicho que Francisco Camps «cuenta con todo el apoyo y todo el cariño de los militantes del Partido Popular», pero ya se sabe que el cariño es menor cuando no se está en el poder. Por si acaso, Barberá ha tirado todos sus bolsos por la ventana…