Sáhara Occidental
Espacios Europeos (7/2/2021)
Virginia Estrada, una colaboradora de la directora de cine y activista internacional, Iara lee, nos ha hecho llegar está película que se rodó hace años, pero que ahora tiene la máxima vigencia. Un trabajo, el de Iara lee y su equipo, que se puede apreciar en esta película de Caipirinha Productions y Cultures of Resistance Films.

Cuatro décadas después de que España abandonara el Sáhara Occidental, el Sáhara Occidental sigue siendo la última colonia de África. Aunque un alto el fuego en 1991, obtenido con la intermediación de la ONU, puso fin a las hostilidades armadas entre Marruecos y el Frente Polisario, el pueblo saharaui ha continuado viviendo bajo la ocupación opresiva de las fuerzas armadas marroquíes; y la paz vigente en la zona –rota a finales de 2020- es en el mejor de los casos, muy frágil, como nos muestra la actualidad.

Decenas de miles de saharauis han huido a la vecina Argelia, donde más de 125.000 refugiados siguen viviendo en campamentos que tenían un propósito temporal, pero que continúan debido a la manifiesta incapacidad de la ONU, la persistente obstrucción de Marruecos,  y el apoyo de Francia y –como se ha visto ahora- de Estados Unidos.

El texto que se publicó, acompañando a la película, fue el siguiente:

“A pesar de estas dificultades, un nuevo movimiento, con los jóvenes como eje central, se está levantando para desafiar los abusos de derechos humanos y para exigir el otrora prometido referéndum sobre la libertad. La actual generación de jóvenes activistas está desplegando una resistencia creativa y no violenta en favor de la causa de la autodeterminación. Mediante esta iniciativa, han perseverado en contra de un torrente de fuerzas en conflicto.

Además de arriesgarse a la tortura y a la desaparición a manos de las autoridades marroquíes, también están haciendo retroceder a aquellos que han perdido la paciencia con la comunidad internacional y están listos para iniciar otra guerra de guerrillas.

La nueva película de la directora Iara Lee examinará estas tensiones, ya que narra la violencia cotidiana de la vida bajo la ocupación, dando voz a las aspiraciones de un pueblo del desierto para los que el colonialismo aún no ha terminado”.