espacioseuropeos.com (19/10/2008)
Desde hace más de treinta y tres años, el Ejército marroquí ocupa un territorio que invadió por la fuerza: el Sáhara Occidental, frente a las Islas Canarias. Marruecos sigue negándose a cumplir las Resoluciones aprobadas por la ONU, para concluir un proceso de descolonización inacabado, y pretende sencillamente anexionarse el Sáhara.

En las zonas ocupadas por Marruecos persisten las detenciones arbitrarias, las torturas, la falta de garantías ante la Policía y

ante los Tribunales, y continúa la persecución a través de juicios penales, con marcado móvil político, contra líderes saharauis cívicos, sociales y defensores y defensoras de los Derechos Humanos.

Del mismo modo, el pueblo marroquí es obligado a vivir bajo los dominios de un régimen anclado en el pasado que desprecia los derechos fundamentales de quienes viven bajo su influencia, especialmente los del Pueblo Saharaui.

De acuerdo al Derecho Internacional, solucionar el conflicto del Sáhara Occidental no es difícil. Es posible diseñar una solución en unas pocas horas con la simple organización de un referéndum de autodeterminación libre y democrático. No se trata de un conflicto étnico, ni religioso o el de dos pueblos por un solo territorio, es un caso claro de ocupación ilegal y por la fuerza de un territorio.

Por ello, debemos denunciar enérgicamente la actitud del Estado Español y su privilegiada relación con la monarquía Alaui. Como Potencia Administradora, responsable política y jurídica

mente de la tragedia que sigue viviendo aún hoy el Pueblo Saharaui, el Estado Español debe contribuir de manera honesta a la solución justa y definitiva del conflicto del Sáhara Occidental y desde luego debe abstenerse de continuar facilitando material militar al régimen marroquí, tal y como, vulnerando cualquier código de conducta sobre el comercio de armas, ha realizado en dos ocasiones a lo largo del presente año (meses de enero y junio).

Igualmente, como ciudadanos y ciudadanas europeas, debemos denunciar la actitud de la UE que comete un acto contrario a la legalidad internacional al firmar con Marruecos un acuerdo de pesca que incluye ilegalmente las aguas jurisdiccionales del Sáhara Occidental. Es otro acto más de explotación ilegal de las riquezas naturales del Pueblo Saharaui, sobre las cuales el derecho internacional le reconoce soberanía permanente.

El 15 de noviembre, la CEAS-Sáhara (Coordinador a Estatal de Asociaciones Solidarias con el Pueblo Saharaui), convoca por quinto año consecutivo una manifestación, que estará presidida por los lemas: Contra la violación de los Derechos Humanos en el Sáhara Occidental y por la Descolonización y la Independencia.

La manifestación se convoca una vez más en las fechas próximas al 14 de noviembre, «para denunciar el abandono que desde hace 33 años sufre el Pueblo Saharaui, para exigir la independencia del Sáhara Occidental y el respeto a los Derechos Humanos en las zonas ocupadas por Marruecos».