espacioseuropeos.com (17/2/2010)afganistan
La Operación Moshtarak («Juntos»), de Estados Unidos y la OTAN, en la que participan unos 15.000 efectivos de la ISAF (Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán), es la mayor ofensiva lanzada contra los talibán desde el inicio de la invasión de este país en 2001.

El objetivo de la Operación Moshtarak es -según el mando estadounidense-, restablecer el control del Gobierno de Kabul sobre la provincia de Helmand en la actualidad controlada por los talibán. Pero, lo cierto es que nunca el gobierno afgano mantuvo controlada esa zona.

Las noticias de esa vasta operación llegan a Occidente debidamente filtradas desde el mando militar occidental, como también hacen los talibán y su entorno. Estados Unidos-OTAN se ha disculpado, prometiendo exhaustivas investigaciones, sobre los «errores» causados en algunos de sus ataques, que han propiciado la muerte de varios civiles.

Por su parte, el movimiento talibán invitó a periodistas de los medios «considerados independientes para que visiten el distrito de Marjah» -donde se desarrolla la Operación Moshtarak-, en la provincia de Helmand, a fin de comprobar que ha sido un fracaso.

De acuerdo con las informaciones transmitidas por diversas agencias de prensa, los talibán han venido difundiendo comunicados desde su página en Internet, La Voz de la Jihad, en los que afirman que la «prensa occidental, financiada por los servicios secretos, ofrecen una visión parcial de lo que está sucediendo en la provincia de Helmand donde hace ocho días comenzó la segunda fase de la Operación Moshtarak», informa RIA Novosti.

Según esa información, las tropas estadounidenses y de la OTAN (Reino Unido, Canadá y Estonia) se «encuentran  atrapados en el centro del distrito de Marjah sin poder avanzar, ya que les resulta difícil atravesar unas antiguas trincheras que los insurgentes llenaron de minas». La información afirma que «al mismo tiempo, los talibán reforzaronafganistan-21 su resistencia con francotiradores que dirigen el fuego contra los militares extranjeros y afganos».

En esta operación militar, que también es mediática, varios periodistas cubren la ofensiva acompañando a las tropas estadounidenses o a las unidades del Ejército afgano. La agencia AFP es una de ellas, aunque le ha sido imposible por razones de seguridad trasladarse al bando talibán.

Por su parte, el diario The New York Times, informa que ayer martes fue capturado en Pakistán el jefe militar de los talibanes afganos. La operación fue realizada por agentes de inteligencia estadounidenses y paquistaníes, aunque la información suministrada fue desmentida poco después por los rebeldes islamistas.

De ser cierta la detención del mulá Barada, sería la más importante desde el comienzo de la invasión de Afganistán. Baradar está considerado como el número dos de los talibanes afganos, tras el fundador del movimiento, el mulá Muhammad Omar.

 A este respecto, la agencia AFP comunica que según conversación mantenida con un responsable talibán, desde un lugar no identificado,  «los rumores que circulan sobre el arresto del mulá Baradar son falsos. Son una gran mentira».