espacioseuropeos.com (9/6/2010)darfur
La misión internacional de pacificación en la región sudanesa de Darfur ha denunciado que el último mes ha sido el más sangriento desde que comenzó el despliegue en enero de 2008, debido a la ruptura de las negociaciones entre el Gobierno de Sudán y los rebeldes. La fuerza conjunta de la Unión Africana y Naciones Unidas (UNAMID) informó que sólo durante el mes de mayo, alrededor de 600 personas perdieron la vida en la región occidental sudanesa. La mayoría de las muertes fueron ocasionadas por el recrudecimiento de los enfrentamientos entre el ejército sudanés y los rebeldes del Movimiento para la Justicia y la Igualdad, un conflicto que dura ya siete años.

UNAMID añadió que se han registrado víctimas en luchas mantenidas por dos tribus islámicas rivales de la zona. La cifra, que según un experto citado por la agencia Reuters quintuplica la media mensual de los últimos años, se explica por la interrupción de las conversaciones de paz entre el gobierno y los rebeldes.

Se calcula que en Darfur hay más de dos millones de desplazados, de los cuales la mayoría vive en campos de refugiados.

La noticia coincide con el primer mes del nuevo mandato del presidente, Omar Hassan El Beshir, vencedor de las elecciones celebradas el pasado abril. La oposición y algunas organizaciones internacionales pusieron en duda la limpieza de los comicios.

El Beshir, que llegó al poder con un golpe militar en 1989, es el primer jefe de Estado contra el que el Tribunal Penal Internacional (TPI) ha dictado una orden de detención. El TPI le acusa de crímenes de guerra, precisamente, en Darfur.

El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ha programado para el próximo 14 de junio un debate sobre la situación en el país africano.

N. de la R.
Esta noticia se publica con la autorización de Mundo Negro.