España
espacioseuropeos.com (2/8/2010)guardia-civil
En declaraciones a la agencia de noticias Europa Press, el portavoz de la AUGC (Asociación Unificada de Guardias Civiles), Juan Antonio Delgado, replicó al ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, manifestando que «él es el primero que tiene que cumplir la Ley, concretamente la de Derechos y Deberes de la Guardia Civil, que lleva más de tres años paralizada, para mejorar las condiciones del Cuerpo».

Estas declaraciones son una respuesta al afán recaudatorio de Interior y, sobre todo, a las circulares internas de la Guardia Civil en las que el ministerio trata de primar a los agentes que pongan más multas.

La AUGC denuncia al Ministerio de Interior «por colgarse la medalla del descenso de la siniestralidad en carretera cuando el mérito le corresponde a los agentes que se juegan la piel en el asfalto», y responde que «si ha bajado la siniestralidad es gracias a la labor y el gran trabajo de los guardias civiles a pesar de las duras condiciones en las que lo hacen».

Delgado declaró a la agencia Eurpa Press que, efectivamente, «hay que aplicar la Ley, pero el primero que tiene que hacerlo es el ministro quien tiene que dar ejemplo y aplicar la Ley de Derechos y Deberes de los guardias civiles que lleva tres años paralizada y congelada no sabemos por qué presiones o por que motivos políticos».

Las denuncias han bajado y  también la siniestralidad y eso se puede demostrar -según el portavoz de la AUGC-, pero «Rubalcaba debería replantearse la seguridad vial: quizá el dinero que se gasta en radares deberían gastárselo en eliminar los puntos negros y mejorar carreteras y atender a los que se dejan la piel en el asfalto».

Delgado acusó a Rubalcaba de no cumplir sus promesas, y que lo «único que se le ocurre es decir que apliquemos la Ley (…) que no se pongan los méritos del trabajo de los guardias civiles, que también de eso están cansados. Coger el micrófono si que lo hacen bien».

Queda claro que el afán recaudatorio de Interior no ha contribuido a que baje la siniestralidad, sino que ha sido al eficaz trabajo de los miembros de la Guardia Civil, y también a la crisis económica, que ha provocado que los automovilistas restrinjan el uso de los vehículos.