Ejercito españolEspaña
espacioseuropeos (29/12/2014)
El Consejo de Ministros celebrado el pasado viernes día 26, acordó aprobar la prórroga de las unidades militares (tropas, observadores, CNI, etc.) que actualmente participan en el extranjero. Dicha prórroga será, de momento, hasta el 31 de diciembre del próximo año.

La referencia del mencionado Consejo de Ministros hace mención a que la decisión de prorrogar la permanencia de unidades militares se tomó en diciembre de 2013. En la actualidad el Ejército español tiene desplazados a 2.042 militares y guardias civiles fuera de nuestro país; 1.107 pertenecen al Ejército de Tierra; 580 a la Armada; 265 al Ejército del Aire; 44 son miembros de la Guardia Civil; y 46 de los Cuerpos Comunes de la Defensa. La información facilitada por el Consejo de Ministros no menciona a miembros del CNI (Centro nacional de Inteligencia) o de otros servicios de la ‘inteligencia’ militar.

Asimismo, el Consejo de Ministros hace referencia a la posibilidad de que sea necesaria la participación de “nuevas iniciativas” en África. Por supuesto, no obvia la grave situación en Ucrania, donde está previsto que el Gobierno de España destine “unidades adicionales a la OTAN”, para “rotar en sus operaciones en la defensa del espacio aéreo de los países bálticos (Defence Air Policing)”.

Poe oreo lado, también se encuentran tropas españolas, sirviendo como instructores en la llamada Coalición Internacional en Irak. En Afganistán, “la finalización de la misión ISAF dará paso en 2015 a la nueva misión de entrenamiento y asesoramiento que pondrá en marcha la OTAN con el nombre de «Resolute Support», lo que implicará el mantenimiento de personal español en Herat y Kabul como contribución española a esta nueva operación”.

El Consejo de Ministros da cuenta de que en “UNIFIL ya se adaptó el contingente a la Revisión Estratégica de la Misión y no se espera una modificación significativa ni del despliegue ni de la entidad del contingente. Esta previsto, asimismo, que dentro de las Fuerzas de Respuesta de la OTAN “se tiene prevista la asignación de unidades militares españolas durante el año 2015, así como la puesta en marcha una Agrupación Táctica de muy alta disponibilidad”.

El despliegue de unidades del Ejército español es el siguiente, de acuerdo con la misma fuente:

– EUFOR/ALTHEA (Bosnia-Herzegovina): 15.
– ATALANTA (Cuenca de Somalia): 395.
– EUTM/Somalia (Uganda / Somalia): 38.
– RESOLUTE SUPPORT (Afganistán): 485.
– UNIFIL (Líbano): 600.
– EUTM/Malí (Malí): 110.
– EUFOR RCA: 85 (hasta abril de 2015).
– Operación A/M (Senegal): 60.
– Operación A/C (Gabón): 50.
– Operación «Active Endeavour».

Pero hay más. Unidades navales españolas participarán en las Fuerzas Navales Permanentes de la OTAN y, en su caso, en la Operación Active Endeavour. Los efectivos españoles asignados a esa operación son los siguientes: dos fragatas y un cazaminas MHC.

El Gobierno de España ha asignado para el mismo periodo las siguientes unidades a la  Fuerza de Reacción de la OTAN: Fuerzas de Respuesta Inmediata (IRF); militares para el Cuartel General de la Agrupación de Apoyo Logístico; una Compañía de Transporte; un Centro de Carburantes; una unidad de Guerra Electrónica; un equipo de inteligencia; un Grupo de Artillería de Campaña; una Compañía de Ingenieros; un Equipo Cooperación cívico-militar (CIMIC). El componente naval asignado es de: un buque de mando para el Mando Componente Naval.

El aéreo lo compone: seis aviones de combate F-18; un avión B-707 de reabastecimiento en vuelo;  Grupo de Fuerzas de Respuesta (RFP); un avión de patrulla marítima; un avión C-295 de transporte; además de personal militar para “el equipo de mando de base de apoyo al despliegue aéreo”; una Unidad de seguridad de base de apoyo al despliegue aéreo; un elemento de apoyo logístico nacional.

Por si fuera poco, el gobierno del PP va a contribuir con la Baltic Air Policing en Estonia, “desde el 1 enero al 1 de mayo, de un destacamento del Ejército del Aire compuesto por cuatro aviones C-16 (Eurofighter) y el personal de apoyo necesario con un contingente de alrededor de 110 efectivos; así como la participación en una batería Patriot del Ejército de Tierra en Turquía durante todo el año 2015 y el personal de apoyo necesario con un contingente del orden de 130 efectivos”.

Desconocemos el gasto que supone ese despliegue militar, que nos imaginamos muy alto, sobre todo si se tiene en cuenta que la mayoría del armamento empleado es de fabricación extranjera, más en concreto de EEUU.

Una vez más nos preguntamos ¿qué intereses nacionales o europeos defendemos con esa política? Más vale que ese despliegue militar y de ‘inteligencia’ se empleara para defender nuestra frontera del Sur que es donde verdaderamente están afectados nuestros intereses nacionales.