Fragatas de la OTAn En Estambul. Foto Euronews.
Fragatas de la OTAn En Estambul. Foto Euronews.

Internacional
espacioseuropeos (5/12/2015)
El ataque, y derribo, de un avión de combate ruso, SU-24, en suelo sirio, a unos cuatro kilómetros de la frontera entre Turquía y Siria, con la muerte de uno de sus pilotos, ha sido un “incidente”, que lejos de aminorar va en aumento. Tras las amenazas de Vladimir Putin a Turquía  de que se arrepentiría de haber derribado el avión ruso, la OTAN ha reaccionado enviando tres fragatas al puerto de Estambul. Las fragatas llegaron el pasado viernes a Estambul, aunque su presencia no se ha justificado como una respuesta militar del organismo atlantista a las amenazas de Rusia. No obstante, para Turquía ha supuesto un respaldo importante. De hecho, ese apoyo se ha traducido en la entrada de tropas y blindados turcos en Irak, violando las leyes internacionales.

Vladimir Putin descartó un día antes de la llegada de las fragatas de la OTAN a Turquía –una de ellas es española-, que su país no optaría por represalias militares, pero eso sí, lanzó veladas amenazas contra el gobierno turco de Erdogan, afirmando que lamentarían haber derribado un avión ruso: “las sanciones no van a ser sólo un saco de tomates”, dijo el mandatario ruso, en relación al bloque de frutas y hortalizas turcas.

Medio mundo critica las amenazas de Putin a Turquía, pero ¿se imaginan que hubiera pasado si cualquier país hubiese derribado un avión estadounidense?