Familiares de los niños yemeníes cavan las tumbas para enterrarlos./ AFP / STRINGER

Yemen/Arabia Saudí
Espacios Europeos (12/8/2018)
La ONU ha condenado el nuevo ataque de Arabia Saudí contra la población del Yemen, que ha dejado más de 40 niños yemeníes muertos, y reclama abrir una investigación para tratar de esclarecer lo sucedido.

El bombardeo aéreo, realizado por la aviación saudí en el norte del Yemen, se produjo el jueves pasado en zonas cercanas a Dahyan-según Cruz Roja Internacional-, y dejó 51 muertos, de ellos 40 son niños. Además hubo casi un centenar de heridos, 56 fueron menores. Los niños iban en un autobús y eran alumnos de una escuela de la zona.

La coalición que lidera Arabia Saudí, que cuenta con el apoyo y sostén de Estados Unidos, defiende en Yemen al régimen de Abdo Rabbu Mansur Hadi, ha reconocido el ataque y sus fatales consecuencias, pero alega que el objetivo de ese ataque “eran los equipos utilizados por los rebeldes hutis para lanzar misiles”, que el miércoles pasado lanzaron un proyectil que causó la muerte a un saudí e hirió a once.

Por si eso fuera poco, Arabia Saudí acusó a los rebeldes yemeníes, apoyados por Irán, de utilizar a niños como escudos humanos. A pesar de esa endeble justificación, la ONU criticó con dureza ese ataque, a la vez que anunciaba una investigación.

Al poco de producirse el ataque, el portavoz del Departamento de Estado (USA), Heather Nauert, afirmó que Washington había pedido a Arabia Saudí que realizase una “investigación completa” sobre este ataque aéreo en Saada, no obstante, calificó a Riad como un “socio estratégico” de EE.UU. en la región.

Estados Unidos no ha confirmado ni desmentido si han prestado asistencia de “inteligencia” a Arabia Saudí en este brutal bombardeo o en otras acciones militares, pero la posición de “socio estratégico”, nos conduce a pensar que sí.

Los datos sobre el número de víctimas es incierto, aunque medios cercanos a ONGs y prensa estadounidense, lo cifran en más de 50.000 personas, de ellas unas 200 son niños.

España es uno de los países que vende munición t armamento a Arabia Saudí, a pesar de ser un país que está inserto en conflictos bélicos.