Sáhara Occidental
Espacios Europeos (30/4/2023)
Desde El Aaiún ocupado nos llega un comunicado de la Liga para la Protección de los Presos Saharauis en las Cárceles Marroquíes –fechado el 28 de este mes-, en el que da cuenta de la expulsión de la abogada francesa Elise Taullet (miembro del Colegio Oficial de Abogados de París) que viajó para supervisar el respeto a los derechos humanos de los presos saharauis en cárceles marroquíes.
Nada más llegar a El Aaiún (lunes 24 de abril), Elise Taullet, “presentó varias solicitudes para visitar a sus clientes, presos políticos saharauis del grupo de Gdeim Izik, para ver en qué condiciones se encuentran en la cárceles marroquíes”, pero la maquinaria de “ocupación” encargada de su acreditación “la han rechazado, retrasando la autorización del trámite. Los servicios competentes para esta tarea son el Ministerio de Justicia, la Administración Penitenciaria y la Fiscalía. Todos se han negado a autorizar a la mencionada abogada la visita a sus clientes. A estos detenidos se les ha negado el acceso a cualquier abogado desde el final del juicio en 2017”, afirma el comunicado de la Liga para la Protección de los Presos Saharauis en las Cárceles Marroquíes.
El objetivo de esta visita –comenta el comunicado de prensa- “sigue siendo intentar levantar el cerco aplicado a los presos políticos saharauis, y arrojar luz sobre los malos tratos y otras formas de tortura psicológica, que se han agravado desde septiembre de 2017, cuando estos presos fueron dispersados por varias cárceles marroquíes, lejos de sus familias, con el empeño del Estado marroquí en negarse a liberarlos o trasladarlos a cárceles cercanas a sus familias”.
Informa la misma fuente que al no obtener respuesta de las autoridades marroquíes, la abogada Taullet –acompañada por Hassanna Douihi, vicepresidente de la LPPS, y de un miembro de su junta directiva, Hassanna Abba– decidió “visitar a las familias de los detenidos en la ciudad ocupada de El Aaiún. Se detuvo en la ciudad de Tan-Tan para visitar al preso político saharaui recientemente liberado, Yahya Mohamed El Hafed Iazza, y a la familia del preso El Hussein Bachir Amaadour”.
Sin esperar mucho, miembros de la Gendarmería Real, que con seguridad seguían sus pasos, les detuvieron en el puesto de control de Oued Elwaer (unos 100 km al norte de la ciudad de Tan-Tan). Elise Taullet fue conducida en un taxi hasta la ciudad marroquí de Agadir.
Ante estos graves hechos, la LPPS muestra su condena por esta “expulsión ilegal”, a la vez que se solidariza con la letrada francesa, y exige a Marruecos “que respete sus obligaciones internacionales de protección de los presos civiles, en particular las estipuladas en las disposiciones del derecho internacional humanitario”.
Asimismo, hace un llamamiento a las organizaciones y organismos internacionales para que “presionen al Estado ocupante marroquí para que libere a todos los presos civiles saharauis en las cárceles marroquíes sin restricciones ni condiciones”.
La LPPS nos recuerda una vez más que el Comité Internacional de la Cruz Roja es plenamente responsable de la protección de los presos civiles saharauis en las cárceles marroquíes. A la vista está su incapacidad para tratar de resol ver esta situación.
A pesar de todas las trabas existente, asociaciones y un sector importante de la prensa se han hecho eco de la expulsión de la aboga Elise Taullet, destacando la limitación y vulneración de la libertad de prensa y de movimiento en el Sáhara Occidental.