Sin Acritud…
Patricia C. Serrano (11/8/2023)
- La Iglesia consideraba a los prestamistas ladrones de tiempo
- La usura era uno de los pecados más graves que condenaban al infierno
Hace siglos, los que ahora son considerados los hombres y mujeres más ricos, envidiados y respetados eran carne del infierno. Banqueros como Ana Patricia Botín, Carlos Torres o José Ignacio Goirigolzarri no hubieran podido esquivar una vida después de la muerte rodeados de demonios, ollas ardientes y temperaturas poco elegantes. Sin embargo, en el siglo XIII, la fuerza emergente del capitalismo logró torcer el brazo a la Iglesia y forzarla a inventar un ingenio para salvar a nuestros futuros banqueros del fuego eterno.
En el siglo XXI, el florecimiento económico y comercial espolea la proliferación de los primeros banqueros, los practicantes de la usura. La Iglesia católica no tarda en identificar su actividad como uno de los pecados más graves, relacionado con la avaricia y la codicia.
Fuente:
El Economista.
Noticias relacionadas:
Incidente de ejecución frente a la resolución del Parlamento de Cataluña, por la que se aprueban las...
Mariem Hassan: La voz Indómita
Para que todo siga igual, el Gobierno de España autoriza la firma del Acuerdo de París sobre el Camb...
Estados Unidos mantiene a unos 2.500 jóvenes encarcelados en Irak, Afganistán y Guantánamo
Finlandia autoriza el paso de los misiles Patriot confiscados, con destino Corea del Sur
Cuba enviará médicos y enfermeros a zonas africanas castigadas por el Ébola
El negacionismo y los bulos del calor: ni se llegó a 50° en 1957 ni se están manipulando los mapas d...
Muere el escritor Francisco Ayala
Etiquetas:
Ana Patricia Botín, banqueros, Carlos Torres, El Purgatorio, infierno, José Ignacio Goirigolzarri, Los Prestamistas, usura