espacioseuropeos.com (6/4/2008)

Unos 200 trabajadores chinos regresaron a su país tras los conflictos habidos la semana pasada en Guinea Ecuatorial entre éstos y la dirección de sus empresas, en los que tuvo que intervenir la Policía Nacional y el Ejército de Guinea Ecuatorial.

Los trabajadores chinos  llegaron el viernes día 4 de este mes al aeropuerto Internacional de Pudong, en Shanghai (China) en un vuelo chárter de la aerolínea China Southern Airlines. Otros 200 trabajadores regresarán a territorio chino en otro vuelo similar, cuya llegada está prevista para este domingo.

La prensa estatal china vio así la noticia: «Doscientos trabajadores chinos que llevaron a cabo una huelga ilegal en Guinea Ecuatorial, en la que murieron dos personas, llegaron hoy a Shanghai procedentes del país africano». Se espera que hoy mismo lleguen al mismo aeropuerto otros 200 trabajadores de esa misma nacionalidad procedentes, asimismo, de Guinea Ecuatorial.

Estos trabajadores chinos pertenecían a la empresa «Dalian China», que actualmente realiza trabajas en Mongomo, en la parte continental de Río Muni.

La información facilitada por la agencia estatal de noticias de China, ha publicado que los trabajadores chinos habían participado en una huelga «sin autorización debido a disputas laborales», aunque mantiene que «las muertes se debieron a los enfrentamientos con la policía ecuatoguineana durante la huelga, el Gobierno de Guinea Ecuatorial desmintió categóricamente este punto, por lo que se está llevando a cabo una investigación de los hechos».

Por su parte, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China, Jiang Yu  declaró que su gobierno ha protestado «formalmente ante Guinea Ecuatorial por lo sucedido».

Lo cierto es que estos trabajadores chinos protestaban ante sus directivos por las pésimas condiciones socio-laborales (horario de trabajo, salarios, etc.). Por otro lado, son numerosas las quejas de la población guineana que se ve obligada a trabajar con empresas chinas y de Corea del Norte, debido al mal trato que reciben, que algunas fuentes califican de racista y humillante.