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Espacioseuropeos.com (25/7/2011)

Santiago Carrillo

Santiago Carrillo

No es Santiago Carrillo personaje de nuestra devoción, por su innegable vinculación a pasajes históricos tan trágicos como la matanza de Paracuellos. Pero este campeón de la supervivencia es un nonagenario lúcido para ver, con sentido crítico, realidades ajenas a las de  su biografía. Ahora, la joven reportera Marta Molina le ha entrevistado para la revista Periodistas y el diálogo ofrece auténtico interés. El viejo caimán de la Prensa y la Política demuestra auténtica lucidez cuando quiere, por más que su memoria sea selectiva. En fin, la verdad es la verdad, la diga Agamenón o su portero.

El Blog de Marta Molina, por otro lado, añade algún pasaje más a los recogidos en el texto de la revista. Y aún refuerza así el valor de los contenidos. Sólo apuntar una errata en esta pieza de antología: la agencia citada realmente era «Febus».

«Lo de la Puerta del Sol es solo el prólogo»

Marta  Molina
Fuma un cigarrillo tras otro hasta dar cuenta de ocho pitillos en el transcurso de hora y media. Santiago Carrillo, periodista y político por estricto orden cronológico, lamenta que la profesión esté prescindiendo de sus maestros y que el parlamentarismo se haya instalado en la simpleza. A los 96 años, coincide con el movimiento 15M en que es necesario refundar política y periodismo para situarlos en el mismo plano que la gente.

. Santiago Carrillo aprendió el oficio de los mejores de la información parlamentaria: Víctor de la Serna, Wencesalo Fernández Flores o Manuel Azaña. ¿Sabe que nos están faltando los maestros?
. Aquella fue una etapa espléndida para hacer periodismo. Los debates eran extraordinarios. Gentes como Azaña, Alcalá Zamora, Prieto, Ortega y Gasset. Una gran escuela política. Los del Parlamento hacíamos dos tipos de periodismo: el de pasillo y el de la tribuna. Quienes nos dedicábamos a esto último éramos realmente explotados.

. También hoy es así, con el añadido de que quedan pocos para enseñar el oficio
. ¿Se refiere a las consecuencias de la crisis? Hoy hay muchos jóvenes periodistas, no así en mi época. Empezábamos a trabajar casi al terminar la escuela. Era un oficio que aprendías en la práctica si sentías el deseo de escribir. Desde los 13 años, redactaba cuentos que bien publicaba en los boletines sindicales bien guardaba para mí. Entré en una imprenta y tuve la suerte de que los de la redacción me leyeran. Lo primero que hice fue cortar teletipos de la agencia Fergus en El Socialista. De ahí pasé a la información municipal y, luego, a la parlamentaria. Fue una etapa magnífica para hacer periodismo. Los debates eran extraordinarios. Horas y horas redactando deprisa. No recuerdo noches sin sesión. Ese periodo fue para mí una especie de Universidad, allí aprendí Ciencias Políticas y aprendí Periodismo.

. ¿Qué parte del periodista permaneció en el político?
. Mi formación como político y periodista discurre paralela. Insisto: fue una etapa extraordinaria. Nada que ver con el presente. No hay altura intelectual. Los diputados de entonces eran grandes oradores. Azaña intervenía sin una sola nota y su alocución era simplemente fenomenal. El parlamentarismo entendido como arte. Las Cortes de ahora son aburridísimas.

. Plano uno: sopor en la tribuna de periodístas
. Al principio de la Transición sí hubo debates político interesantes. Los políticos de entonces se hacían en la lucha, en la calle, en los discursos, en los grandes mítines. Un parlamentario tenía que saber hablar. Ahora no, la elocuencia ha perdido importancia. El márketing es el orfebre de los políticos del siglo XXI. Previo paso por el Parlamento, Azaña entrenó su dialéctica en los debates del Ateneo de Madrid, polemizando con otros grandes intelectuales. La oratoria era la forma de llegar a las gentes y de conseguir un prestigio, una reputación.

. De reputación, precisamente, no anda sobrada la política
. Evidentemente, la política de hoy no es la de entonces. Está desprestigiada porque quien la dirige no es la sociedad o el Estado, sino el sistema financiero. Esta crisis es todo un ejemplo. No es que la política de antes fuera totalmente independiente, pero gozaba de mayores prerrogativas.

. ¿Está desconectada de la realidad, como dice el movimiento 15M?
. La política la deciden personas desconocidas para la gente. Individuos que se sientan en consejos de administración, que dirigen bancos, que gestionan organismos financieros… Dirigen la política y determinan la orientación de la prensa. No nos engañemos: esta prensa, aparentemente nacional e independiente, no tiene nada de nacional ni de independiente. Grandes multinacionales financian a la mayoría de los medios de comunicación. La prensa forma parte de este conglomerado global que es el sistema financiero y, por ende, defiende los intereses del sistema. No solo la política, también la prensa se ha alejado mucho de la ciudadanía.

Víctimas, pero enemistadosperiodicos
. ¿Valdría más una prensa ciudadana?
. Antes cuando yo era joven y más tarde cuando ya no lo era tanto, los partidos políticos imprimían sus propios diarios. Aquella prensa sí estaba cerca de la gente, no así la actual. La política y los medios de comunicación navegan con arreglo a sus intereses, desafectos de la ciudadanía. La politización de los medios y la mediatización de la política son fenómenos que afectan a políticos y periodistas por igual. Somos víctimas y, sin embargo, peleamos a diario.

. ¿Enemistades de amigos?
. El político y el periodista se han convertido en hombres que, a consciencia o inconscientemente, están trabajando para alguien que no los ha elegido. Cuando escucho a periodistas, y soy periodista y me siento periodista, quejarse de que los políticos no contestan a sus preguntas, de que no respetan la independencia de la prensa, me pregunto a qué imparcialidad de la prensa se refieren. El periodista liberado lucha contra su patrón cuando así se lo ordena su conciencia. ¿De cuál independencia de la prensa hablamos? ¿De la que no existe?

. ¿Por qué así?
. Porque el sistema financiero constituye un poder fáctico mayúsculo. Los mercados presionan al margen de los cauces formales. No los ha elegido nadie, pero mandan.

. ¿Habrá quien les pare los pies?
. ¡Qué difícil es profetizar! Nos dirigimos hacia un vaciamiento de los sistemas democráticos, a una fórmula en la que el pueblo no se sentirá representado porque, aunque haya ejercido su derecho al voto y eligiera a sus gobernantes, lo hizo a partir de un número limitado de candidatos impulsados por los medios de comunicación. Vamos hacia sistemas políticos cada vez menos democráticos. Habrá movimientos mayores que el 15M. En Grecia, Portugal, Irlanda, quizá también en España, en aquellos países que están siendo rescatados… Lo de la Puerta del Sol es solo el prólogo de algo más serio, más grave, menos amable y pacífico. Llegará un momento en que la gente se harte, como en el norte de África. Así ha sucedido siempre.

. El consabido origen económico de revoluciones y guerras…
. La guerra es todavía posible. En la práctica se está preparando una tercera guerra mundial. ¿Por qué si no tanto armamento? La democracia va perdiendo sustancia. Los ciudadanos viven enajenados por los medios de comunicación, incapaces de hacer sentir su voluntad. Nos habíamos hecho la ilusión de que tras la Primera Guerra Mundial y, sobre todo después de la Segunda, todo iba a ser más pacífico. No está resultando así.

. ¿Habla del espíritu de consenso?
. Pronto España experimentará cambios muy serios más allá de la alternancia de partidos. Con las elecciones municipales y autonómicas ha comenzado a producirse una transformación que puede completarse en las generales. Huele… La derecha española no es como la francesa… Huele a rancio. Terminará dándose una involución.

. El pueblo ha elegido
. España tiene todavía un pensamiento muy influido por la Iglesia, muy de derechas, muy estrecho… ¿Cuántos diarios de izquierdas hay en Madrid?

. ¿Público? ¿El País?
. Ah, ¿pero hay alguno? ¿Cuántas televisiones? ¿Cuántas radios? Los medios conforman la opinión pública, no los partidos políticos. Habrá momentos en que vote A y otros en que quiera librarse de A. El pueblo se equivoca por la desorientación y confusión de los que deben guiarlo ideológica y políticamente. Cuando la población traspase su umbral de sufrimiento, se dará cuenta de que la están manipulando.

. ¿Habla de los medios de comunicación?
. El pueblo aprende de su experiencia diaria y avanza en el camino de la democracia, a trompicones muchas veces. Avanza y retrocede. Por fortuna, la juventud actual disfruta de una cultura superior a la de generaciones anteriores. Los jóvenes son más difíciles de comprar, pero incluso ellos padecen la influencia de los medios.

. Participa como tertuliano en el programa La Ventana de la SER, ¿qué opinión le merece este formato?
. ¿La plaga de las tertulias? Es una vergüenza que estén acaparando tanto espacio. Ya no oigo ningún debate de periodistas. Incluso la televisión pública está plagada de esos programas en los que intervienen señores y señoras que no entienden una puta palabra de lo que hablan. Si el tema es político, dicen las mayores tonterías como si fueran a desvelar el secreto de los dioses. Si es económico o internacional, todavía peor, pontifican. Las empresas periodísticas solo quieren periodistas afines, con independencia de su profesionalidad.

. Y, a usted, ¿cómo le han tratado los medios?
. No suelo hablar de esos temas porque son cosas que ya no tienen remedio, pero durante la Transición tuve toda la prensa en contra. Hice un gran esfuerzo personal por que mi partido encabezase la reconciliación de los españoles y superase los odios y las heridas de la guerra civil con la intención de abrir una situación de democracia. En lugar de agradecerlo, me han puesto todas las zancadillas posibles.

. ¿También con la prensa de partido?
. Los periódicos de Madrid cumplían una directiva procedente de Estados Unidos y Alemania Federal para evitar que los comunistas adquirieran peso. Con una OTAN muy debilitada a causa de la revolución de los claveles en Portugal y del buen entendimiento de François Mitterrand con los comunistas franceses, hubo una especie de conjunción planetaria para reducirnos. Utilizaron todas las formas de presión existentes. Intentamos sacar adelante un diario propio, Mundo Obrero, sí, y tuvimos que cerrarlo. Nos ahogaba económicamente. Tirábamos desprovistos de publicidad institucional y privada, que nos negaron. No había manera de mantenerlo. Hemos sufrido una hostilidad muy seria.

Marta Molina

De refundaciones
. La prensa contra la izquierda
. Este país necesita una nueva izquierda. Ni el comunismo ni la socialdemocracia son fórmulas políticas convenientes hoy. Haría falta un nuevo partido de la izquierda que fuera más flexible, que abarcase muchas más formas de pensar. Esa nueva izquierda surgirá, es inevitable.

. ¿Una nueva izquierda y una nueva prensa?
. Incluso la derecha sabe que esto no acaba de ir. Nicolas Sarkozy abogó por la refundación del capitalismo nada más estallar la crisis. Tampoco la revolución es el camino. La vía es una nueva clase política dotada de una visión independiente y que comprenda que la política debe dirigir la economía y no al revés. Lo mismo vale para la prensa.

. ¿Refundación del periodismo? ¿Periodismo real también, como demanda Democracia Real?
. Ese movimiento defiende reclamaciones muy positivas; algunas, hasta elementales. Continuará desarrollándose porque llegará un momento en que la calle sea el único lugar que le quede a la ciudadanía y los medios están fuera de ese universo.

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