Barcelona (Cataluña/España)
espacioseuropeos.com (7/4/2012)comercio-chino-en-barcelona
Un paseo por cualquier ciudad española, bien por las zonas céntricas o suburbios, nos permite darnos cuenta de la implantación de ciudadanos asiáticos, sobre todo chinos, en nuestro país. Restaurantes, bazares y otro tipo de negocios, controlados por ciudadanos chinos, son cada vez más habituales de ver en España. Las actividades de las otras nacionalidades son más diversas y van desde los locutorios hasta la venta en la calle de productos pirateados.  La mayoría de estos ciudadanos entran en España de forma ilegal.  

Hace unos días, el ayuntamiento de Barcelona ha reconocido que la ciudad es «la puerta de entrada de inmigración asiática en el sur de Europa». Este reconocimiento lo ha hecho el ayuntamiento de la ciudad condal en un informe sobre la población extranjera afincada en la ciudad.

De acuerdo con los datos aportados en este estudio, el número de inmigrantes se ha estabilizado en Barcelona con un 17,4% de empadronamientos, aunque otras cifras indican que es mayor.

El número de extranjeros en Barcelona, a 1 de enero de 2012, es de 282.178 personas, un 1,4% más respecto al año anterior, según datos de ese informe. Los paquistaníes son la comunidad más numerosa con 23.281 ciudadanos, seguida de los italianos, con 22.909 y los chinos, en tercer lugar, por delante de ecuatorianos y rumanos.

Por otro lado, el estudio aporta un dato curioso: el 31,1% de los matrimonios que se celebran en Barcelona son mixtas, y alrededor del 10% donde los dos cónyuges son extranjeros. El número de hispanoamericanos ha disminuido, sin embargo aumenta el de asiáticos y europeos del Este.

Con estos datos, no es de extrañar que a pesar de los esfuerzos de los nacionalistas catalanes, la identidad catalana se vaya diluyendo como los terrones de azúcar en la leche.