GuantanamoEstados Unidos
espacioseuropeos (30/12/2015)
Medios de comunicación internacionales informan que el Pentágono obstaculizó durante años los intentos del gobierno de Barack Obama para cerrar Guantánamo. Los obstáculos fueron, lógicamente, de tipo burocrático, tratando de “demorar o impedir” que determinados presos fueran liberados.

Desconocemos si el contenido de la información publicada es cierta o no, pues nos extraña que el presidente de Estados Unidos no pueda llevar a cabo una promesa electoral debida a “obstáculos” puestos por el Pentágono, del cual “Comandante Supremo”.

La primera información, la ha facilitado, al parecer, la agencia Reuters, que se hace eco de un informe estatal en el que se recogen documentos elaborados por James Dobbins, que fuera enviado especial para Afganistán y Pakistán del Departamento de Estado.

De acuerdo con la misma fuente, el Pentágono se negó –o retardó- facilitar fotos e informes médicos que habían sido solicitados por gobiernos extranjeros, documentos que eran necesarios para facilitar el traslado de presos de Guantánamo a los países solicitantes.

Además, en otras ocasiones, el Pentágono obstaculizó las visitas de delegaciones o impidió estancias prolongadas en la base que estados Unidos mantiene en Cuba.

La información facilita casos concretos de esas actuaciones. Por ejemplo, se inhabilitó o se retrasó  el traslado de prisioneros a Uruguay, Kazajistán, Mauritania y  al Reino Unido, “por meses o años”. Otros sucedido son, por ejemplo, las torturas que recibieron unos presos por guardar “un tallo de manzana» o el que un preso estuvo por error 13 años encerrado en esa prisión militar.

En la misma noticia se cuestiona que el presidente Obama pueda conseguir hacer efectiva su promesa de cerrar ese centro carcelario.

Cuando llegó Obama a la presidencia (año 2009), había en Guantánamo 242 presos, en la actualidad se encuentran encerrados 107 personas. Cifras que contrastan con el número de presos que en la etapa de la presidencia de George W. Bush, el gobierno permitió trasladar a otros países. Por aquel entonces 532 presos consiguieron salir de Guantánamo en seis años, alguno de ellos se encuentran en España.