Corea del Sur
Espacios Europeos (11/3/2017)
El Tribunal Constitucional de Corea del Sur destituyó ayer a la presidenta del país, Park Geun-hye, a causa de las acusaciones de soborno y corrupción. El fallo del TC surcoreano fue unánime en su decisión, retirándole la inmunidad. Tras esta sentencia, Geun-hye podría enfrentarse a cargos penales.
En diciembre del año pasado, los poderes de la entonces presidenta fueron recortados cuando el Parlamento votó mayoritariamente para que se le impusieran sanciones. Seguidores de Park se manifestaron ayer viernes, intentando atravesar las barreras policiales, para llegar hasta el Tribunal Constitucional, en Seúl. La violencia de los manifestantes provocó una fuerte reacción de las fuerzas de seguridad. El resultado fue de dos personas muertas, varias otras heridas y numerosas detenciones.
No parece que la petición del primer ministro, y presidente interino, Hwang Kyo-ahn, de apeló a la calma, haya tenido éxito de momento: “Para evitar que se intensifiquen los conflictos internos, deberíamos apelar al orden social y mantener un gobierno estable, con el fin de apaciguar la ansiedad a nivel nacional y la preocupación de la comunidad internacional”, afirmó Kyo-ahn.
En 60 días, el Parlamento surcoreano procederá a una votación para elegir nuevo presidente. Todo indica que el Partido Conservador que lidera la ex presidenta, recibirá una aplastante derrota.
Asimismo, se espera que el nuevo presidente opte por una política más conservadora con su vecino, y ancestral enemigo, Corea del Norte, decisión que no parece ser del agrado de Estados Unidos, cuya política –continuada por Trump– consiste en crear una zona de conflicto en la zona.