España Espacios Europeos (10/9/2021)
Dos digitales de signo distinto, La Razón y el Insurgente publican que esta semana se ha registrado en el Ministerio del Interior la Asociación Nacional Cultural e Histórica de Víctimas del Frente Popular”, que va –según sus estatutos- a favor de «la verdad» frente a la «falsa, parcial y sectaria Memoria Histórica».
España/Economía Manuel Funes Robert (23/12/2013)
Mis lectores conocen desde hace décadas mi interés por el estudio histórico-económico del pasado siglo XX. En particular requiere mi atención la etapa del franquismo, que siempre he querido abordar desde la perspectiva técnica si bien es cierto lo difícil que resulta separar los contextos políticos de los económicos. Intentaremos, empero, a dejar en estas líneas fuera de discusión las limitaciones que el régimen impuso en materia de libertades.
En los años 60-75 la política económica aplicada durante el franquismo
Sin Acritud… Manuel Funes Robert (16/12/2013)
La memoria histórica está tomando derroteros con los que no contaban quienes inventaron el concepto pensando en una sola dirección. Al dar noticia del libro de José Luis de Funes, “Memorias de un miliciano”, hice una alusión tangencial a los procesos de Moscú en tiempos de Stalin. Dos obras maestras se han hecho eco de aquella historia sangrienta, “El cero y el infinito” de Arthur Koestler y “Yo escogí la libertad” de Víctor Kravchenco, a los que podría añadirse a cierta distancia “Yo, ministro de Stalin en España”, de Jesús Hernández.
Kravchenco fue enviado a España por Stalin como representante suyo
España espacioseuropeos (20/5/2013)
´El Confidencial´ ha publicado una entrevista con Ramón Tamames, ex miembro de la ejecutiva del Partido Comunista, además de catedrático, escritor, tertuliano y más cosas. En respuesta a una de las preguntas del entrevistador, Tamames le dice que se vio Copn el Rey en febrero de este año, que Juan Carlos le llamó –fue antes del accidente de Botsuana-, y que le encontró bien, “aunque un poco atemorizado por la situación, y preocupado; pero este hombre tiene siete vidas”. Como si fuera de su consejo asesor, Tamames dice que “Abdicar seria el reconocimiento de un fracaso, y no es para tanto: ha tenido unos tres o cuatro años muy agitados y con muchos errores, pero su reinado ha sido, en general, muy aceptable, y ha sido el primer rey absolutamente constitucional de España”.
La verdad es que después de conocer –parte- de las “actividades” de los Duques de Palma, a uno se le hace un tanto híspido eso de “aceptable” y del “primer rey absolutamente constitucional”.
España José Manuel G. Torga (28/5/2009)
La lectura del libro de José Ataz me ha proporcionado una sensación continua de autenticidad. Contiene testimonio y opinión, sin recovecos. Trasluce un recto impulso por no callar una versión vital, aunque bracea contra corriente.
El aire sobrio de la edición contribuye a reforzar su gesto, de tono equilibrado, por más que implique la polémica. Antecedentes de signos opuestos hacen inevitable la confrontación. Sobre todo ahora, cuando la oportunidad de poner cada cosa en su sitio se ha malbaratado en aras del revanchismo. Los ganadores de la Guerra Civil usufructuaron casi cuarenta años de poder; luego, los perdedores torsionan la realidad hasta el punto de actuar como si el desenlace bélico hubiera sido al revés del que fue.
Mi Columna Eugenio Pordomingo (9/3/2009)
A menudo nos recuerdan eso de que los pueblos que olvidan su historia están obligados a repetirla. Pero, existe otra ley (social) que no conviene olvidar, y es que las sociedades, al igual que los cuerpos físicos, se mueven por acciones y reacciones. Lo que viene a significar que todos los cuerpos sociales actúan, como defensa, con cierto sentido del equilibrio.
España A. G. (10/4/2008)
Con una sequía amenazante, a principios de esta semana, el ex presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, nos sorprendió con unas declaraciones acerca de las atrocidades cometidas en Cataluña durante la guerra civil y sobre la memoria histórica.
Según Jordi Pujol, el Gobierno catalán debe pedir perdón por las atrocidades ocurridas en Cataluña durante la Guerra Civil, porque “la República y la Generalitat perdieron el control de la calle”. Sorprendentemente, el ex jefazo de CiU, admitió que incluso él “debió haber pedido disculpas durante sus años de gobierno, ya que no lo hizo su antecesor y primer presidente de la Generalitat restaurada, Josep Tarradellas“. Nos llama la atención, sin embargo, que no aludiera a los presidentes que le sucedieron, Pasqual Maragall y José Montilla.