Tio Gilito
Tio Gilito

España
Javier Martínez (3/2/2014)
La alcaldesa Botella está estudiando ceder una finca pública al Opus Dei. La universidad de Navarra está en negociaciones con el Ayuntamiento de Madrid para instalar en un pulmón verde de la capital de 18 Ha. con una casa solariega del siglo XVI la quinta de sus sedes privadas para impartir postgrados.

Se trata de la Quinta Torre Arias situada enfrente del metro de Suanzes, finca y casa solariega que a la muerte de su propietaria hace un año, la condesa de Torre Arias la otorgó a los madrileños con la condición de que se abriera al público para su esparcimiento y recreo como parque municipal, además cuenta con la casona, caballerizas y casa de labranza que son un ejemplo de arquitectura del siglo XVI y que deberían de ser objeto de patrimonio nacional.

Una vez más vemos como estos liberales de “pacotilla” se quieren apropiar de lo ajeno y construyen sus negocios en base a la desposesión ciudadana.

La naturaleza depredadora, antisocial y parasitaria de esta casta instalada en el poder pone una vez más a prueba a la resistencia ciudadana con su espíritu permanente de latrocinio revestido de mercantil emprendeduría a la que califican de social.

Sin ir más lejos este nuevo atentado contra los bienes públicos se une al reciente Anteproyecto de Ley de Parques Nacionales que modifica la normativa existente e introduce importantes cambios: Por ejemplo, la posibilidad de construir en Parques Nacionales, permitir el uso de actividades comerciales, antes prohibidas en estos espacios, eso sí, “si es con fines turísticos y recreativos y si contribuyen al desarrollo”.

¿A qué modelo de desarrollo se refieren señor@s?:

Navegación en el Parque Nacional del Monfragüe, vuelo sin motor en el Parque de Guadarrama, urbanización de los Parques Nacionales, es comprensible que un gobierno cuyos miembros tienen una sensibilidad ecológica digna de un Prestige hagan números y como el “tío Gilito” vean las monedas a recoger negociando con lo que no es suyo.

¡Ah y viva el fracking! que es muy sano y seguro para los ciudadanos, sólo hay algunos unos posibles inconvenientes, entre otros: peligros de contaminación de las aguas subterráneas, se pueden contaminar arroyos y si tocan alguna falla no se preocupen por los terremotos pues hay que acostumbrarse a este modelo de desarrollo y de progreso en los bolsillos de la casta. Y siempre nos queda el recurso de que Santa Teresa vele por nosotros, pobres ignorantes y pecadores. ¡Ad maiorem Dei Gloriam!

Con la reciente Ley de Costas, más de lo mismo, después del acoso e intento fallido de derribo de la Sanidad Pública, con los recortes en la Educación Pública, lo último con la propuesta de los mini Erasmus nos salen con una nueva cada día.

Y lo repugnante por paradójico es que se amparen en una llamada libertad de mercado, o en la no discriminación religiosa…

Esa misma no discriminación religiosa o libertad de conciencia no la cumplen ni la hacen cumplir, cuando por ejemplo en el 2004 se estrenó en Madrid la obra del dramaturgo y cuñado de Esperanza Aguirre, Iñigo Ramírez de Haro, marqués de Cazaza en Africa, cuando en el Círculo de Bellas Artes representó “Me cago en Dios” y tuvo que comparecer ante el juez por provocación ante el odio religioso.

Además dos de los nietos del recientemente fallecido Blas Piñar, Miguel y Santiago Menéndez Piñar, irrumpieron en la obra de teatro ‘Me cago en Dios’ y patearon al actor Fernando Incera sobre el escenario y con la posterior agresión a puñetazos a Íñigo Ramírez de Haro, autor del libreto.

¡Ay esta España de pandereta y de pinturas negras! Siempre que nos descuidamos vuelve a resurgir al grito de viva la muerte y muera la inteligencia.

Si les dejamos avanzar en su demagógica apelación e interpretación torticera y latrónica de los derechos de la mayoría ciudadana, utilización abusiva de los derechos constitucionales para vaciarlos de su contenido, terminarán no sólo con dejarnos desnudos y a la intemperie, sin un pan ni trabajo ni un techo sino además con un cinturón de castidad en la entrepierna y un bozal en la boca.

N. de la R.
El autor es Licenciado en Derecho, Master en Economía y miembro de ATTAC.