Submarino nuclear HMS Ambush de la Royal Navy
Reino Unido
espacioseuropeos (27/8/2016)
Incumpliendo, de momento, el resultado del Brexit, Londres retrasa hasta el próximo año su salida de la Unión Europea. Nunca quisieron estar en el euro, iban a su aire, aferrados a su Libra, y en comandita con Estados Unidos hacían sus guerras desoyendo a la UE y, en muchos casos, al margen de la ONU. Eso sí, ante el temor de que sus virreyes en Gibraltar a ser marginados, Londres se apresta a declarar que garantizará a su colonia en España que no habrá cambios inmediatos tras el Brexit.
Y así, la primera ministra británica, Theresa May, se lo ha hecho saber al Ministro Principal de Gibraltar, Fabián Picardo: la premier británica dijo que ese territorio no sufrirá cambios inmediatos como consecuencia del resultado del Brexit.
«Tardaremos un tiempo en concretar nuestra futura relación con la UE, pero le garantizo que no habrá cambios inmediatos en situación de Gibraltar en cuanto a la libre circulación de personas o la prestación de servicios», dijo May en una carta dirigida a Picardo.
En otro párrafo de la misiva, la premier británica dice: «Nunca concluiremos acuerdos mediante los cuales Gibraltar pase a estar bajo la soberanía de otro Estado en contra de sus deseos ni participaremos en ningún proceso de negociación de la soberanía que no satisfaga a Gibraltar».
Por cierto, seguimos esperando que el Reino Unido de explicaciones al gobierno español, como aseguró que haría, por el accidente que provocó el submarino nuclear ‘HMS Ambush’ de la Royal Navy, que por fin está siendo reparado en puertos británicas. A pesar que se dijo –el embajador británico en España- que el reactor nuclear del submarino no había sufrido ningún daño, todo parece indicar que no fue así.
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