José Luis Ábalos, Ministro de Fomento. Foto Europa Press.

España
José Luis Heras Celemín
(20/11/2018)
José Luis Ábalos es Secretario de Organización del PSOE y ministro de Fomento. En un momento como el actual, en el que el Gobierno aparece en prensa con su presidente y ocho ministros para celebrar el simple aniversario del periódico económico Expansión, el discurso de Ábalos en el Desayuno Informativo de Europa Press interesaba por un motivo doble: Por su cargo en el PSOE y por su condición de ministro.

Repasemos su discurso. Empezó mostrando la realidad nacional con pinceladas: Estado de beatífica calma, de fatiga. España está llena de ruido. Hay señales de un tiempo de transición que amenaza al sistema político. Desde hace diez años, lo que parecía sólido se ha venido abajo. Movida social. Solidez de equilibrios políticos. Tiro en el pie del brexit. En España, qué vamos a contar, el gobierno ha tenido que encargarse de lo que había ¿Qué pretenden los del ruido? ¿Cuestionar la legitimidad del poder es acertado o nos hace más vulnerables?. Pese a los errores, estamos llevando a España donde debe estar. España sigue creciendo más que la UE. El paro en octubre es menor del 15%. España puede ser más y mejor. Cataluña está mejor. El Gobierno está produciendo un giro social. No hay democracia que resista la desigualdad social. Construir un nuevo contrato social.

-¿Pero, está hablando el ministro de Fomento?.– preguntó alguien.

Hablaba un hombre de partido que después se situó en la órbita de su responsabilidad en el gobierno: Pobreza. Políticas de vivienda. Techo digno. Vivienda social sólo del 2,5%. Ley Estatal de Vivienda. Mejorar el mercado de alquiler. Reformar Ley de Arrendamientos Urbanos y Ley de Enjuiciamiento Civil. 5.000 viviendas de alquiler a menos de 400€. Propuesta de pacto de Estado para la vivienda. 40 años de democracia han permitido red de autopistas, AVE, tercera potencia portuaria, Infraestructuras que mejoran la competitividad… Redes de movilidad para que el transporte no sea un problema de personas. Mejorar Cercanías, material rodante, estaciones, nuevas líneas, cadena logística e interoperabilidad de redes ferroviarias. La política de infraestructuras ocupa muchas páginas, pero no es bueno el agravio permanente. Los recursos públicos son limitados. Las infraestructuras no son sólo obras, promueven derechos. Política de Estado para un Pacto en transportes. Defender ideas sin caer en el insulto. Honestidad intelectual. Respeto. Civismo y buena educación, con ellos se vive mejor. O defendemos el entendimiento entre todos o se deteriora todo.

Con eso acabó el discurso. Ábalos es un hombre tranquilo, con fama de sensato, que pintó la realidad con datos que fue acomodando al gobierno del que forma parte. Podía haber hecho propuestas, en el área de su competencia, basadas en presupuestos, cifras y cálculos. Pero lo evitó. En su lugar, optó por abrir el abanico del poder y ofrecer las colaboraciones que necesita el Gobierno. Pero lo que interesa no son añagazas con ofertas de colaboraciones; tampoco cuitas de políticos y partidos. Lo dicho, discurseado, llena espacio. Pero faltaba lo importante, la Noticia. Fue necesario que Europa Press, con García Vila como moderador, tirara de profesión para centrar el tema ante Ábalos en el turno de preguntas. Se sucedieron así varias con un doble provecho: Contenido. E intención.

Anotemos, resumido, el contenido de los dúos pregunta-respuesta:

¿Quién es mal educado?. Quien abuchea al Presidente. Es el presidente del gobierno de España y es intolerable el abucheo.

¿Errores del Gobierno? Que los busquen otros.

¿Está tirando el Gobierno la toalla en los PGE? Somos un Gobierno realista que está trabajando. Nos exigen, pero unos no saben de qué va y otros lo condicionan a procesos que no conocen. Hay cuestiones que son tan importantes que no vamos a esperar. Iremos al Decreto-Ley.

¿El 26 de mayo superdomingo electoral? Nada es descartable. El presidente tiene atributos que puede manejar. Lo hará cuando crea que debe hacerlo.

¿Hay alternativa a peajes? Estamos trabajando, el Gobierno abre debate.

¿Tiene que haber peajes? El uso de infraestructuras debe pagarse, porque si no paga el que no la usa.

¿Autopistas quebradas? Las hemos encontrado así.

¿Cómo ajustarse a energía eléctrica? No nos lo hemos planteado.

¿Le parece bien el desarrollo de la Operación Chamartín? Sólo sé que está en trámite de aprobación definitiva del Ayuntamiento. Lo apoyamos. No veo a la alcaldesa en plan especulativo. Lo que salga lo va a invertir en la misma zona. Creo que es un buen proyecto.

¿Ferrocarril en Extremadura? No me siento responsable.

¿AVE en competencia privada. 2019 o 2020? Estamos en escenario de privatización. Cuando esté preparado.

¿Cuándo R.D.L. sobre vivienda? Algunas medidas antes de final de año.

¿Segundo Aeropuerto de Madrid? No quiero inmiscuirme en ningún negocio. Está en estudio.

¿Ataque a propiedades del juez Llerena? Como cuando asaltaban casas del PSC, rechazable desde la serenidad.

¿Ilegalizar a Arrán? No me gusta sentenciar.

¿Indultos a presos catalanes antes de Navidad? Respeto a la ley y tribunales. Si no la justicia se condiciona. Este debate no favorece a nadie.

¿El poder corrompe en Andalucía? Absurdo. El gobierno en Andalucía es lo que la gente votó. Otros gobernaron Andalucía años y años.

¿PSOE en Ayuntamiento de Madrid? Pondremos el mejor cartel  posible.

Repasado el contenido de los dúos pregunta-respuesta, pasemos a la interpretación de intenciones. Para señalar los dos bloques que existen:

El formado por las intenciones premeditadas registradas en el discurso de Ábalos, que ofrece a la Oposición, como señuelos, las colaboraciones que necesita el Gobierno bajo el nombre de Pactos de Estado.

Y el oculto, descubierto con las preguntas de García Vila. Éste lo definió un periodista con una frase que es algo mejor que un resumen y más que un titular: Ábalos está cansado y en demasiados asuntos no sabe qué hacer. Pero marea a la perdiz.