Los tentáculos del Poder
España
Wenceslao Alonso Nieto (2/4/2019)
Frente a la función que en un Estado de Derecho debe llevar a cabo quien ostenta un cargo político, que debe ser la defensa del interés general y el servicio transparente a la ciudadanía en el ámbito competencial y territorial que le corresponda, existen múltiples y continuos ejemplos de la utilización artificiosa de ese poder para fines espúreos, que nada tienen que ver con el interés de la ciudadanía sino con la avaricia personal de quien la ejerce.
Es cierto que, lamentablemente, las normas, las leyes, a veces facilitan esa “contaminación de la vida democrática” por cuanto que, elaboradas inicialmente por técnicos pero retocadas a su antojo y aprobadas en última instancia por políticos, éstos