¿Caerá o no el Guindo?
¿Caerá o no el Guindo?

España/Economía
Javier Martínez (21/8/2014)
Una vez más los hechos vienen a contradecir las declaraciones del gobierno del señor Rajoy y muestran los errores continuados de su política económica y social durante los más de tres años de gobierno del PP. La caída en junio de las exportaciones españolas, con un descenso del 1,2% de ventas y el incremento de las exportaciones en ese mismo mes en un 5,4% arrojan un déficit comercial cercano a los 100.000 millones de euros, duplicando el déficit del año 2013.

Uno de los cacareados motores de éxito de las medidas de Rajoy eran las exportaciones, pues bien, desgraciadamente, para los sufridos ciudadanos españoles la realidad contradice estas políticas austericidas.

Por otro lado, la Deuda Pública se acerca ya a niveles del 100% del PIB. Y el paro sigue ocupando el tercer puesto de la UE, con niveles cercanos al 25%; el desempleo juvenil se sitúa en el 55%; los parados mayores de 40 años son un 40% y 740.000 hogares están sin ningún ingreso.

El descenso continuado de los ingresos ciudadanos y el error de echar mano de la caja de las pensiones han provocado que haya un agujero en la Seguridad Social de 24.652 millones.

Ni rebajando continuamente los salarios ni con reformas laborales recortadoras de derechos económicos y sociales, se  puede salir de la crisis iniciada en 2007. Tratar de competir siguiendo como modelo la “chinización” de la economía española sólo contribuye a crear pobreza y miseria social y así no se logra más que incrementar las desigualdades sociales.

Queremos ser Alemania pero sin inversión, sin industria propia  y con un sector primario (agricultura, pesca y ganadería), cada vez más olvidado y vendido a intereses foráneos antiespañoles.

En el mundo dominan actualmente tres modelos económicos: e consenso de  Washington, el consenso desarrollista-socialista de Beijing (Pekín) y el consenso desarrollista de Mumbay (Bombay). Existe un cuarto modelo alternativo ecológico, solidario y de reparto de la riqueza nacional.

El llamado consenso de Washington tiene como objetivos principales:
1.- La limitación del Gasto Público, la reducción o desaparición de los subsidios y de las políticas sociales, contención del gasto público de las administraciones públicas, destrucción del estado social y de la inversión pública y de cualquier intervención o rol del estado en la economía, únicamente el estado ha de intervenir para proteger los intereses de la Banca y de las grandes corporaciones multinacionales privadas.

2.- La obsesión por la limitación de los déficits y Deuda Pública a unos determinados niveles arbitrarios.

3.- Las políticas de privatizaciones de empresas públicas y la venta a grupos privados del patrimonio y bienes públicos.

4.- La propiedad privada como única forma de propiedad existente.

5.- La desregulación del mercado de trabajo, de los precios y de los flujos sin control de capitales.

6.- La competitividad basada en el dumping social, en la bajada continuada de salarios, la precarización del trabajo, empleo temporal y parcial, eliminación del salario mínimo y de empleo sin derechos.

7.- La desindustrialización, la deslocalización y las desinversiones productivas. Potenciación de la economía de casino con el incremento de las inversiones y finanzas especulativas.

En España, los gobiernos PP/PSOE han sido fieles seguidores del Consenso de Washington, sin tampoco aprobar los exámenes frente a sus amos americano-europeos, pues véase, los niveles alcanzados por la Deuda Pública para salvar la banca española.

El incremento descomunal de la Deuda Pública española que antes del estallido de la crisis 2007 era del 36% frente al 66% de la media europea y ahora vamos camino de superar al PIB anual.

¿A qué intereses han servido y sirven los gobiernos PP y PSOE?  Independientemente de las operaciones de maquillaje y nuevas caras pero manteniendo los mismos criterios de políticas económicas. Evidentemente, a los de la inmensa mayoría de ciudadanos españoles no.

Podemos y debemos actuar para revertir esta sangría ciudadana y destrucción de país.

Otras políticas por otro gobierno son posibles y podemos y debemos empezar entre otras medidas de arranque en un cambio político por:

– Evaluar las privatizaciones de empresas y de patrimonio público realizadas por PP/PSOE. Analizar su coste y a quiénes han beneficiado.
-Analizar coste-beneficio del rescate de la banca.
– Analizar coste-beneficio y auditoría de la Deuda Pública española.
– Analizar el fraude de las empresas eléctricas; analizar coste-beneficio.
– Analizar el origen de las 100 mayores fortunas españolas y creación de una política fiscal progresiva como marca la Constitución vigente.
– Fijación de un salario mínimo acorde al entorno europeo y de un salario máximo.
– Reparto del trabajo mediante reducción de la jornada laboral.
– Reindustrializar el país, relocalizar empresas, creación de una banca pública y de inversión, revitalizar el sector primario de la economía con una reforma agraria, ganadera y una política pesquera que sirva  a los intereses nacionales.

Estas son sólo algunas de las líneas de arranque porque muchos españoles queremos y podemos hacerlo y el mundo no se limita a un solo modelo de consenso.