espacioseuropeos.com (6/6/2009)Zapatero
El último número de la revista británica «The Economist» acusa al presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, de practicar el «ilusionismo»  y sacar «conejos de la chistera» al presentar, en el debate del estado de la Nación, las últimas medidas del gobierno para pretender frenar la crisis económica.

«The Economist» critica que el presidente del gobierno español no explicó durante su intervención en el debate, cómo financiará los ordenadores portátiles para los estudiantes, ni tampoco en qué partida presupuestaria  iba a incluir los 2.000 euros para los compradores de automóviles nuevos. La crítica la extiende el semanario británico a las desgravaciones fiscales para las pequeñas empresas (PYMES) por no despedir a sus trabajadores.

El problema de Zapatero -según el semanario- es que no está en condiciones de hacer grandes promesas, ya que encabeza un Gobierno minoritario en el Congreso de los Diputados, que no puede aprobar leyes sin el apoyo de los partidos más pequeños. El semanario, menciona que el presidente del Gobierno no puede controlar a los gobiernos autonómicos a los que necesita para sacar adelante sus planes, aunque muchos de ellos se «diluyan antes de llegar al Parlamento».

Por otro lado, «The Economist», asegura que algunas de las últimas medidas de Zapatero «tenían truco». Todo ello es «una prueba más de que la debilidad política de Zapatero está perjudicando su capacidad de sacar a flote una economía que se redujo en un 3% en el último año».

Zapatero habla de un acuerdo con los sindicatos y la patronal con la finalidad de transformar la economía española del «ladrillo y el mortero», en una estructura económica «basada en el conocimiento«; pero para ello -menciona «The Economist»-  «va a necesitar más que una chistera para sacar esto adelante».

Cual será la próxima diatriba de «The Economist» contra Zapatero.