Francia
espacioseuropeos.com (19/7/2010)
La muerte de un joven de etnia gitana, en la pequeña localidad de Saint-Aignan, situada en el centro de Francia, ha provocado otro núcleo de violencia. En la noche del viernes al sábado el joven gitano de 22 años, conocido como «Luigi», murió a causa de los disparos realizados por un agente de la policía francesa durante una persecución en automóvil. Al parecer, el joven se había saltado un control policial.
Al día siguiente, una cincuentena de personas que protestaban por la muerte del joven «Luigi», causaron destrozos en vehículos, derribaron árboles, semáforos y quemaron mobiliario urbano, así como daños en algunos establecimientos.
Según los medios de comunicación franceses, esos manifestantes -de etnia gitana- se dirigieron posteriormente a la sede de la gendarmería local donde protagonizaron actos vandálicos. Los manifestantes portaban hachas, machetes, picos y diversos utensilios con los que destrozaron las oficinas policiales.
Ante la gravedad de la situación, el Gobierno francés decidió el envió de 300 soldados, además de dos helicópteros, a la localidad de Saint-Aignan. Las fuerzas se desplegaron por las zonas más conflictivas, así como en los centros oficiales en evitación de nuevos asaltos.
La Prefectura (Gobierno Civil) de la zona emitió un comunicado en el que advierte que las fuerzas militares «se enfrentarán a cualquier reanudación de la violencia».
Por otro lado, la localidad de Grenoble, donde murió otro joven -musulmán en este caso- en el transcurso de un enfrentamiento con la policía después de que el fallecido hubiese atracado un casino, continúa en estado de alerta,
Otro verano «caliente» está a la vuelta de la esquina, y no por lo elevado de la temperatura. No obstante, estos incidentes pueden contribuir a que la imagen de Nicolas Sarkozy, bastante deteriorada últimamente, pueda recuperarse algo.
N. de la R.
La fotografía de portada ha sido publicada en varios medios y es propiedad de AFP.