Din Acritud…
Pedro Godoy P. (26/5/2013)

Estatua de José Martí en La Habana
Estatua de José Martí en La Habana

El apóstol se ahoga en mármol y en bronce. El pedestal de su estatua lo aleja de la muchedumbre y le confiere un aura de héroe. Sin duda, lo es, pero no envuelto en la túnica de personaje mítico. Piénsese que nace en 1853 y perece en combate en 1895. Vive apena 42 años. Es abogado, docente, prosista, poeta, periodista y soldado. Vive en diversos países. Residiendo en Nueva York publica nota en la prensa a propósito del deceso de Carlos Marx a la sazón su coetáneo. La publica en EEUU y se reproduce en el diario ´La Nación´ de Buenos Aires. Allí lo elogia porque defiende a los desvalidos y pone de relieve su influjo en diversos círculos. El texto no autoriza a presentar un Martí adherente del marxismo.

Pese a lo dicho le atribuyen una militancia de esa índole. Sin embargo, cabe señalar que, al año siguiente, glosa la obra de Heriberto Spencer: ´La nueva esclavitud´. Allí se lee que una república socialista implica peligrosa acumulación de atribuciones en los funcionarios. El Estado sería tan aplastante que el individuo pasa, de siervo de los empresarios, a siervo de los burócratas. Éstos, serían ambiciosos y abusadores. No es fácil, el análisis. Se confunden las teorías spenceríanas con las presuntas convicciones del cubano. No obstante, sorprende la profecía de la obra y el interés de Martí por comentarla. El artículo lo cierra exigiendo a Spencer que critique también la desigualdades de la sociedad brotada del capitalismo.

N. de la R.
El profesor. Pedro Godoy P. es miembro del Centro de Estudios Chilenos CEDECh.