Internacional
Espacios Europeos (14/4/2018)
Trump cumple su amenaza sobre Siria. El presidente estadounidense ha anunciado en una breve intervención que sus Fuerzas Armadas, conjuntamente con las de Francia y el Reino Unido, han llevado a cabo un ataque contra objetivos clave de producción y almacenamiento de armas químicas del régimen sirio. Dos de los objetivos se encontraban en Homs, dos almacenes, y uno en Damasco, un centro de investigación y desarrollo.
Con esta ofensiva, estos tres países responden al presunto ataque químico ocurrido el pasado sábado en la ciudad de Duma, del que culpan al Gobierno sirio. Washington asegura tener pruebas fehacientes de que se usó un tipo de agente químico. En ese ataque murieron al menos 70 personas, muchos de ellas niños.
Estados Unidos no había respondido a un ataque químico sirio contra su población desde abril de 2017, cuando destruyó un objetivo importante del régimen.
Trump ha acusado a Al Asad de no actuar como un hombre sino como un «monstruo» y ha criticado que Rusia e Irán apoyen al régimen de Damasco.
El presidente francés, Emmanuel Macron, y la primera ministra británica, Theresa May, han confirmado y apoyado con sus palabras este ataque.
Es la primera decisión importante de May a este nivel desde que accedió al cargo.
El ministro de Exteriores ruso, Sergéi Lavrov, ha culpado a los medios occidentales del ataque sobre Siria y ha dicho que el país ha sido atacado cuando tenía una oportunidad para la paz. Otro alto diplomático ha dicho que el ataque no quedará sin consecuencias.
Informaciones del régimen afirman que los sirios desalojaron las bases «hace días» por advertencia de los rusos, e insisten en que han derribado la mitad de los misiles que les fueron lanzados.
Estados Unidos había dejado claro que no había avisado a Rusia de qué objetivos iba a atacar, aunque le había pedido que despejara el espacio aéreo para evitar bajas rusas.
El secretario de Defensa, James Mattis, ha asegurado que los tres objetivos han sido elegidos para minimizar los daños colaterales y para desgastar al máximo la maquinaria de guerra de Al Asad. También ha anunciado que no habrá más ataques de momento.
Rusia, cuyo embajador en la ONU, Vasili Nebenzia, no descartó esta misma semana una guerra en caso de una intervención en el país árabe, va a pedir una reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU. Su embajador en Estados Unidos, Anatoly Antonov, ha escrito en facebook que «estas acciones no quedarán sin consecuencias».
El ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Javad Zariv, ha advertido de que Estados Unidos y sus aliados responsables de las consecuencias regionales y transregionales por su aventurismo. El país persa es, junto a Rusia, el principal aliado del régimen de Bachar al Asad.
Fuente: Euronews.
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