espacioseuropeos.com (19/4/2008)

Un informe realizado por la Corporación RAND,  revela que 300.000 soldados estadounidenses que sirvieron en Irak y Afganistán padecen en la actualidad graves problemas psíquicos como depresiones y «estrés postraumático».

De acuerdo con este informe, casi un 20 por ciento de los soldados estadounidenses que estuvieron en las zonas de guerra de Irak y Afganistán «presentan síntomas del síndrome de estrés postraumático y de depresión», aunque sólo la mitad de ellos han buscado ayuda médica.

Según informa Democracy Now, Terri Tanielian, investigadora de RAND, informó que: «A menos que reciban un tratamiento adecuado y efectivo para estos trastornos mentales, habrá consecuencias a largo plazo para ellos y el país».

Las mismas fuentes nos informan que el estudio también «estima que 320.000 miembros de las Fuerzas Armadas sufrieron posibles lesiones cerebrales traumáticas mientras estaban en servicio».

Coincidiendo con la publicación de este informe, nos llega la noticia de que el Centro Médico VA de Dallas (Texas) debió cerrar el ingreso de nuevos pacientes al pabellón psiquiátrico debido al suicidio de cuatro veteranos de guerra.

Que sepamos, el Ejército español no ha realizado estudios similares, al menos que conozcamos.