E. P. (1/2/2010)
A pesar de que el Tribunal Supremo ha prorrogado por sexto mes consecutivo el secreto sobre el «caso Gürtel», la verdad es que de repente, el asunto ha recobrado actualidad. El magistrado instructor de este caso de corrupción política, empresarial y política, es Francisco Monterde, prorrogó, como digo, por sexto mes el secreto del sumario de este escabroso caso, en el que están entremezclados el senador y ex tesorero del PP, Luis Bárcenas, y el diputado nacional del mismo partido, Jesús Merino.
Hoy el diario «El País» nos desvela algunos pormenores sustanciosos de este asunto. Por ejemplo, que el Partido Popular le paga el abogado a Luis Bárcenas en el «caso Gürtel». Carlos E. Cué, afirma en su artículo en «El País, que Bárcenas «es el mejor tratado de la quincena de imputados que ha tenido ese partido en el caso Gürtel».
Bárcenas, «no sólo mantiene su despacho en la calle Génova -aunque le han quitado el cartel de la puerta-, su secretaria, su puesto de senador y su militancia». Pero lo más curiosos es que -como dice Cué– «el PP se está haciendo cargo de los voluminosos costes de su defensa, según confirman varias fuentes de la formación».
El abogado que el PP ha contratado para defender legalmente al ex tesorero popular es Miguel Bajo, uno de los más afamados penalistas de Madrid, pese a que «el tesorero dispone de un importante patrimonio, valorado en unos tres millones de euros«.
Otra curiosidad que conlleva esta contratación legal, es la de que, mientras a Bárcenas el partido corre con esos gastos, al resto de los imputados no se los pagan. «Todos los implicados madrileños en la trama Gürtel -entre ellos tres diputados autonómicos, Alberto López Viejo, Alfonso Bosch y Benjamín Martín Vasco, y tres ex alcaldes, Jesús Sepúlveda, Arturo González Panero, Ginés López– se pagan de su bolsillo sus abogados».
Todos los implicados en el «caso Gürtel» han sido suspendidos de militancia, menos Bárcenas. «Los cargos y las pruebas que figuran en el informe de la Fiscalía Anticorrupción contra el tesorero son de los más relevantes de todo el sumario del caso Gürtel. Las pruebas de su alto nivel de vida, tratándose de un funcionario del partido que ha dedicado toda su vida profesional al PP, han generado malestar en la organización, especialmente desde que se conoció la documentación que le atribuye un regalo de la red Gürtel de un safari de superlujo a Zimbabue».
Mariano Rajoy trata a Bárcenas de forma muy «exquisita», según la misma fuente; de hecho, el ex tesorero dimitió de su puesto como tesorero nacional en el PP tan sólo 24 horas antes de «ser imputado por el Supremo, cuando Rajoy le contó que la decisión era inminente, que en el partido se dispararon los temores de que estuviera chantajeando al líder con información delicada».
El mismo trato de favor recibe en el Senado, «donde sigue acudiendo a las reuniones de la dirección del grupo parlamentario, de la que es miembro, e incluso sigue ostentando el cargo de tesorero del grupo».
Otro personaje que no puede quejarse del trato recibido por Mariano Rajoy es Jesús Sepúlveda, ex alcalde de Pozuelo de Alarcón (Madrid) -también implicado en el «caso Gürtel»-, de quien se dice que también tiene despacho en Génova 13, sede nacional del PP. Y la diputada Ana Mato, su ex mujer, tampoco sale mal librada de ese amparo pontevedrés, pues estaba casada con él cuando, supuestamente, recibían regalos cuantiosos de Francisco Correa y su red.