China
espacioseuropeos (4/9/2013)Contaminacion en China
De manera repentina e inesperada, el Gobierno de China ordenó a las dos empresas chinas de petróleo más importantes, PetroChina y Sinopec, que detengan la expansión de su “capacidad de refino”. La tajante orden partió del Ministerio de Medio Ambiente.

La medida fue justificada por un portavoz ministerial debido al fracaso de las dos empresas “ante la contaminación de las aguas en el interior y los alrededores de los yacimientos” en los que trabajan. La medida vista desde el punto de vista de las compañías explotadoras, plantea problemas a la industria petrolera que, curiosamente, es estatal. El Ministerio de Medio Ambiente ha anunciado una investigación por “delitos no especificados” contra cuatro altos ejecutivos de las dos empresas petroleras.

De acuerdo con la información facilitada por el Ministerio de Medio Ambiente, las empresas PetroChina y Sinopec “no habrían cumplido con los objetivos de reducir, dentro de los límites de la tolerancia, la demanda de oxígeno químico”, parámetro que está relaciona con los contaminantes vertidos a las aguas.

Las nuevas medidas son consideradas como una advertencia contra aquellos ejecutivos que, al amparo de su trabajo en compañías estatales, se saltan las normas y hacen caso omiso de las advertencias de grupos ecologistas. Las sanciones impuestas a PetroChina y Sinopec van a marcar una nueva etapa, ya que hasta ahora las grandes compañías estatales era “indultadas” por las autoridades reguladoras.

La nueva filosofía del gobierno chino va encaminada a tratar de rebajar los elevados índices de contaminación existentes en China, uno de los más altos del mundo.

Quizás haya tenido mucho que ver con esta decisión la grave situación que atraviesa Japón, y el mundo, por lo sucedido en la central nuclear de Fukushima, donde los técnicos y autoridades se ven incapaces de controlar los cientos de litros de agua radioactiva que a diario se filtran a la tierra y se vierten al mar.

tierra y se vierten al mar.