España
Alejandra Durrell (10/6/2018)
En los Desayunos de RTVE, del jueves día 8, Pablo Iglesias mostró su malestar con Pedro Sánchez. Se le notaba molesto y quizás tengo razones para ello. Al parecer, Sánchez ni le ha llamado desde la moción de censura. Atrás queda ya el abrazo en el que se fundieron él y Pedro Sánchez tras el resultado de la votación de la moción de censura en el Congreso de los Diputados.
Pablo Iglesias y Pedro Sánchez no habían hablado ni pactado nada antes de la moción de censura. La verdad es que el resultado pilló a todos de sorpresa. Eso sí, Podemos había abogado pocas horas antes por formar un gobierno transversal y amplio, pero como se ha visto, Pedro Sánchez ha apostado –como era previsible- por gobernar en solitario. Sánchez quería tener las manos libres para nombrar a quien quisiera sin presiones de ningún tipo y menos de Podemos.
Iglesias comentó nada más conocer los nombramientos de ministras y ministros, que “ha tardado 24 horas en olvidarse de quien le ha hecho presidente (…) Pedro Sánchez ha hecho un Gobierno con gente que le gusta a Ciudadanos y al PP. Pero hoy no es el día de criticar al Gobierno –dijo- ahora tocan unas semanas de cortesía parlamentaria”.
Políticamente correcto, el líder de Podemos no entró a valorar los nombramientos de ministras y ministros, simplemente dijo que juzgaría al nuevo gobierno por lo que hagan al frente de sus respectivos ministerios.
Respecto a su rechazo a la oferta del PSOE para que miembros de Podemos entraran en el nuevo gobierno en un segundo nivel, comentó que él había propuesto la formación de un Ejecutivo amplio y transversal, y no había sido aceptado. Y comentó que el actual gobierno es el “más débil de Europa, sólo sustentado por 84 diputados, y el más débil de la historia de España”.
No obstante, Pablo Iglesias afirmó que iban a ofrecer todo tipo de ayuda legislativa al PSOE con el fin de ayudar a la gente de este país y a resolver problemas, aunque ello les perjudicase electoralmente. Asimismo, auguró que “Pasar por Moncloa con el Gobierno más débil no será una buena travesía para Sánchez”.
Recordó Iglesias que el PSOE ha estado “en el estado de excepción (artículo 155) territorial con PP y Ciudadanos. Los conflictos territoriales no necesariamente se resuelven, pero se gestionan, y se puede hacer de forma autoritaria o democrática”, pero valoró que sea Meritxell Batet quién se encargue de la cuestión territorial, y no Josep Borrell, que gusta poco en Cataluña.
A tenor de las declaraciones de Pablo Iglesias en los Desayunos de RTVE, todo parece indicar que el apoyo de Podemos a Pedro Sánchez no era tan “incondicional” como se nos ha hecho creer. Esa actitud puede augurar que de ahora en adelante el PSOE va a actuar como si estuviera en campaña electoral, y su enemigo más próximo en arrebatarle votos es, sin duda alguna Podemos.
Por otro lado, los “enanos” no dejan de crecerle a Podemos. Tras la compra de su lujoso chalé en Galapagar, vino un plebiscito en el que uno de cada tres inscritos e inscritas no les dieron “credibilidad” a la pareja Iglesias-Montero. Desconfianza que se acrecienta tras la negativa, en rueda de prensa, de Irene Montero de explicar qué es lo que hacía el tesorero de Podemos, Daniel de Frutos, en el acto de formalización de la hipoteca en la Caja de Ingenieros que les concedió el crédito para la compra de su chalé. Montero lo explicó así: “Ya hemos dado todas las explicaciones necesarias, bastantes más que las necesarias, y por tanto, creo que ya hemos dado todas las explicaciones que teníamos que dar al respecto sobre este tema”.
Los asuntos internos se le complican más a Podemos tras la acusación de la secretaria general de Podemos-Andalucía, Teresa Rodríguez, a Pablo Echenique, secretario de Organización de Podemos, de haber elaborado un informe falso cuyo objetivo es atacarla a ella y a su pareja, Kichi, José María González, alcalde de Cádiz. En el informe se menciona la supuesta “rebelión” de los dos acusados que pretenden presentar una candidatura para las elecciones autonómicas junto a IU al margen de la dirección central del partido.
Por si fuera poco, la publicación de un Manifiesto, elaborado por el sector anticapitalista, divergente con la línea oficial mantenida por Podemos, ha levantado ampollas en la dirección del partido.
Y hoy, el diario El Mundo, publica una larga entrevista con el actor y activista político, Willy Toledo, en la que, entre otras cosas, dice –en respuesta a la pregunta ¿Qué te parece la casa de 600.000 euros que se han comprado Iglesias y Montero?– “Decían que no venían a ganar dinero en la política. Y ahora tienen muchísimo más dinero que cuando entraron a la política… Un partido en el que el número uno es pareja de la número dos y esa número dos lo es sólo después de haber sido pareja del número uno… Es porque es la trepa número uno”.
Estamos en plena campaña electoral a la búsqueda del poder. Nos queda mucho por ver y escuchar. Atentos.
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