Marruecos
Carlos Ruiz Miguel (1/8/2011)
El 30 de julio celebró Mohamed VI su acceso al trono. No es buena la situación de su régimen. Por más que al lobby pro-marroquí no le guste, la situación en Marruecos es extremadamente inestable. La operación «constitucional» de Mohamed VI ha fracasado. Dejando al margen las consideraciones que se puedan hacer sobre el fraude en el referéndum, es un hecho que la nueva «Constitución» no ha cumplido las expectativas del pueblo que reclama más democracia. Y, en este contexto se producen luchas internas por el poder en el majzen marroquí que parece que llegan al intento de asesinato.I. FRACASO DE LA OPERACIÓN PSEUDO-CONSTITUCIONAL…
Aunque tras el fraudulento referéndum se desencadenaron las felicitaciones al majzen (sobre lo que ya me he ocupado aquí en relación al grave error cometido por el Partido Popular), lo cierto es que la movilización no ha cesado.Los medios españoles están guardando un sospechoso silencio sobre la cuestión, pero las protestas siguen en Marruecos. Sin embargo, todos aquellos miembros del «lobby» que se quejaban del «desconocimiento» que hay en España sobre Marruecos no parecen preocupados porque se conozcan las protestas contra el majzen.Y, sin embargo, después de la «masiva aprobación» de la nueva «Constitución» no han dejado de producirse manifestaciones de protesta:
– ha habido manifestaciones masivas contra el referéndum fraudulento;
– ha habido manifestaciones masivas el 10 de julio.
– ha habido manifestaciones masivas el 17 de julio.
– ha habido manifestaciones masivas los días 23 y 24 de julio.II. …Y LUCHAS POR EL PODER EN EL MAJZEN
En este contexto en el que, por primera vez, el pueblo ha perdido el miedo a la tiranía alauita, el nerviosismo y las disensiones entre los diversos sectores del majzen alcanza proporciones alarmantes.
1. Guerra entre el espionaje interior y el exterior.
El primer episodio lo hemos tenido en la lucha (que viene de antiguo) entre el jefe del espionaje exterior (Yasín Mansuri) y los que siguen mandando en el espionaje interior, aunque no tengan puestos oficiales allí (Fuad Ali Himma y Munir Mayidi).
El atentado de Marrakech del 28 de abril de 2011 no parece ajeno a esta polémica. El periodista Rashid Niny, unos días antes del atentado de Marrakech publicó en su periódico informaciones que cuestionaban el verdadero papel del servicio secreto interior (entonces controlado por Himma) en los atentados del 16 de mayo de 2003 en Casablanca.
Todo parece indicar que el espionaje exterior utilizó a un periodista de su órbita (Rashid Niny) para, mediante «oportunas» revelaciones, intentar abortar el eventual proyecto del espionaje interior de un atentado para alterar el curso político del régimen o enviar un «mensaje» a Francia.
El hecho es que Niny fue (y permanece) encarcelado, una decisión criticada por medios de intoxicación en la órbita del espionaje exterior marroquí.
Todo ello parece que da a entender que el sector de Himma se ha impuesto sobre Mansuri.
2. ¿Intenta el espionaje interior liquidar al poder militar?
En este contexto, aparecen tres nuevas hechos sin duda preocupantes.
El primero es la información publicada en Marruecos por Le Reporter con este título que lo dice todo «El general Benslimán, ¿ha escapado a un atentado?«.
El segundo es el extraño asesinato del guardaespaldas personal de Mohamed VI.
Aunque podría tener una motivación privada o personal (¿era amante de algún hombre o mujer importante del majzen?), el asesinato parece que era militar, según investigación del servicio secreto interior. ¿Se trata de un enfrentamiento entre el ejército y el servicio secreto interior?
Y el tercero es la caída del avión militar en la que han muerto todos los pasajeros. Una caída sobre la que existen graves interrogantes. Tal y como se ha sugerido por Leonardo Urrutia la pregunta es: ¿se trató de liquidar a alguien? La pregunta es tanto más pertinente cuanto que a día de hoy… no me consta que se haya publicado la lista de pasajeros muertos… o la lista de pasajeros prevista inicialmente para saber si hubo alguien que estaba previsto que subiera al avión y a última hora dejó de hacerlo.
El avión por cierto, venía de Villa Cisneros. ¿Podría ser que Benanni, jefe del ejército de ocupación del Sáhara, o alguien de su entorno fuera el objetivo del eventual «accidente»?
III. CONCLUSIÓN
El régimen alauita parece que atraviesa un momento crítico. No recuerdo momentos tan inestables desde los años 1971 y 1972 cuando se produjeron los atentados contra Marruecos.
De aquella inestabilidad se creyó salir con la entrega del Sáhara Occidental facilitada por el lobby pro-marroquí español.
No sé si alguien en el lobby pro-marroquí español tendrá la tentación de «echar una mano» al majzen entregando Ceuta y Melilla. El majzen está lanzando oleadas de emigrantes contra estas dos ciudades españolas en lo que es indudablemente un chantaje.
La entrega del Sáhara Occidental no dio estabilidad a Marruecos. Sólo provocó el reforzamiento de un régimen criminal y corrupto.
En este momento, creo que sólo la complicidad o la estupidez pueden llevar a pensar que más entreguismo español puede salvar al régimen alauita.
N. de la R.
Este artículo, que también pueden ver en Desde el Atlántico, se publica con la autorización de Carlos Ruiz Miguel, Catedrático de la Universidad de Santiago de Compostela. |