Sáhara Occidental
Eugenio Sánchez (24/5/2015)
Takbar Haddi, madre del joven saharaui Mohamed Lamin Haidala, asesinado en el Territorio No Autónomo del Sáhara Occidental, ocupado ilegalmente por Marruecos, y cuya Potencia Administradora sigue siendo España, según el art.73 Cap XI de la Carta de Naciones Unidas, entró hoy en su décimo día de huelga de hambre indefinida frente al Consulado de Marruecos en Las Palmas de Gran Canaria. Su objetivo es poder recuperar los restos mortales de su hijo, así como denunciar las continuas violaciones de Derechos Humanos que se vienen produciendo, desde que España abandonó unilateralmente el Sahara Occidental, en 1975.
A pesar de que las autoridades marroquíes han intentado comprar su silencio, Takbar Haddi, si bien desea con nobleza y una gran dignidad, que la muerte de su hijo sea la última, exige que se haga justicia y se depuren las responsabilidades correspondientes, a todos los niveles.
Mohamed Lamin Haidala, fue golpeado y torturado por varios colonos marroquíes el pasado 30 de enero, en El Aaiún, por sus ideas y convicciones independentistas, infligiéndole heridas de gravedad, que no impidieron que fuera detenido. Y aunque posteriormente fue puesto en libertad, sus graves heridas internas y la intencionada negación de su entrada en varias clínicas, provocaron su muerte, el 8 de febrero del presente año.
Takbar Haddi viajó el jueves a Estrasburgo, invitada por Podemos e Izquierda Unida, para exponer su caso ante el Parlamento Europeo, reuniéndose con diversos grupos y eurodiputados, reclamando JUSTICIA, la detención de los asesinos de su hijo, la exhumación y autopsia del cadáver por especialistas médicos independientes y la entrega de los restos mortales a la familia para poder enterrar a su hijo de forma digna.
Tras cuarenta años de la firma de los ilegales “A
cuerdos de Madrid”., España, la Potencia Administradora del Territorio No Autónomo del Sahara Occidental permanece impasible ante la realidad que se vive diariamente en el Sáhara Occidental, ocultando sus responsabilidades, y tratando de evitar que se recuerde que el inicio del genocidio saharaui, comenzó con los bombardeos de las localidades de Guelta Zenmur, Um Draiga y Tifariti, desde principios de enero de 1976, hasta el 22 de febrero del mismo año,.. ¡¡estando ESPAÑA presente en el territorio¡¡.
Nos solidarizamos con la lucha de esta madre coraje saharaui y exigimos del gobierno y grupos políticos de ESPAÑA, actúen en consecuencia, de acuerdo a las obligaciones y cumplimientos que emanan de la Carta de Naciones Unidas, Declaración Universal de Derechos Humanos, Constitución Española, Código Civil, y los Pactos Internacionales firmados y ratificados por ESPAÑA.