El conflicto del Sáhara se “descongela”. Como siempre, la primera víctima ha sido la verdad
Sáhara Occidental
Ana Camacho (26/11/2020)
Ya lo advirtió hace años el anterior secretario de las Naciones Unidas Ban Ki-Moon, que la falta de ineficacia de la ONU a la hora de cumplir con su misión en el Sáhara Occidental, acabaría agotando la paciencia de los saharauis y quebrando esa falsa paz que surge de los llamados conflictos “congelados”. Nadie hizo caso porque, entre otras cosas, varios miembros del Consejo de Seguridad tenían interés en favorecer a Marruecos y que la ONU no organizase el referéndum de autodeterminación al que, de acuerdo a las resoluciones de Naciones Unidas, tiene derecho el pueblo saharaui.
“Conflicto congelado” es un término muy utilizado en jerga geopolítica para esos problemas que no están resueltos pero no generan campos de batalla y que la comunidad internacional deja a un lado para resolver otros asuntos más urgentes donde sí corre la sangre. En los últimos veinte años se ha utilizado, por ejemplo, para resumir la situación de la descolonización pendiente de la