Cartel anunciador de la Marcha de la Dignidad
Cartel anunciador de la Marcha de la Dignidad

España
espacioseuropeos (9/3/2015)
Las Marchas de la Dignidad vuelven a Madrid el 21 de marzo para exigir Pan, Trabajo, Techo y Dignidad. “A Madrid caminando hacia la Huelga General con el objetivo de exigir una vida con dignidad”, anuncian los convocantes de esta nueva Marcha de la Dignidad.

Está previsto que desde todos los puntos de España columnas de dignidad se movilizarán para defender el programa del Movimiento 22M como paso previo a la convocatoria de la movilización general de octubre concretada en una Huelga General laboral, de consumo y social, se dice en la convocatoria de la Marcha del 21 de marzo.

A un año de la importante y numerosa manifestación del 22M que concentró en Madrid a centenares de miles de personas que reivindicaban una “vida digna, la situación no ha cambiado a mejor y se profundizan las consecuencias de los perversos efectos de las llamadas políticas de austeridad impuestas por la Troika contra la mayoría social del estado español”, según afirman los convocantes.

La realidad desmiente de forma descarnada al gobierno del Partido Popular y a los poderes que lo apoyan, la campaña de publicidad para vender la idea de que hemos salido de la crisis –algo en lo que en Bruselas no comparten-, se da de bruces con la realidad.

Las Marchas de la Dignidad vuelven a Madrid el próximo 21 de marzo, afirman los convocantes. Los datos que apoyan el profundo malestar en el que la mayoría de los ciudadanos viven son, entre otros, los siguientes: la tasa de paro (EPA) sigue situada en el 24% de población con más de cinco millones y medio de personas en situación de desempleo; la cobertura de prestaciones a la personas sin empleo no llega al 58%. Cerca de tres millones de personas carecen de ingresos, situación que afecta a más de medio millón de hogares. Los empleos que se crean son precarios y con salarios de miseria por lo que hoy se es pobre incluso teniendo empleo.

Por otro lado, la diferencia salarial entre hombres y mujeres es del 24%. El paro juvenil supera el 55% y cada día son más los jóvenes que, como sus abuelos, tienen que emigrar para poder tener el futuro que este país les niega. Las pensiones pierden poder adquisitivo año tras año y su revalorización es una auténtica vergüenza. Y, por supuesto, los recortes en Sanidad, Educación, Dependencia, etc., van en aumento. Los llamados “pobres energéticos” y el número de suicidios aumentan de forma alarmante. En consecuencia, el aumento de la pobreza es cada vez más evidente.

La corrupción y las irregularidades fiscales roban a las arcas del Estado español un 5% del PIB, y junto a ello, la política fiscal beneficia a los que más tienen, recayendo la carga sobre la clase trabajadora y la mayoría social. La consecuencia es que en España aumenta el número de millonarios y también el de pobres.

Todo ello tiene sus efectos por la reforma del artículo 135 de la Constitución Española, pactado entre el PP y el PSOE, mediante el cual se hipoteca nuestra soberanía a los dictados de la UE y el BCE, priorizando el pago de la deuda a los especuladores, al bienestar y los derechos de la mayoría social, además de obstaculizar nuestro desarrollo económico. Se hace así patente la descomposición del régimen del 78.

Ante esta situación, lo único que se le ocurre al Gobierno de España es aumentar la represión contra el pueblo, la reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana y del Código Penal, que tienen por objeto la merma de derechos y libertades de los ciudadanos para silenciar a un pueblo que sufre y al que están empobreciendo como medio para la dominación y la explotación.

“Las Marchas de la Dignidad vuelven a pedir a la mayoría social y a la clase trabajadora que se movilice, que demuestre en la calle que QUEREMOS VIVIR CON DIGNIDAD, que identifiquemos a los culpables de esta grave e injusta situación social y defendamos el programa de las marchas de la dignidad”, se afirma en la convocatoria.

Algunas de las peticiones de la Marcha de la Dignidad, que piden en un “gran consenso social y político” son No al pago de la deuda, ilegal, ilegitima y odiosa; la defensa de los servicios públicos para todos; trabajo digno con derechos y salario suficiente; reducción de la jornada de trabajo y renta básica; la defensa de los derechos de la mujer y por un futuro para nuestra juventud; contra la precariedad laboral y social; no a las reformas laborales; contra la represión y contra la Ley Mordaza; no al TTIP (tratado entre gobiernos y  transnacionales) que va contra los derechos sociales; por el derecho a una vivienda digna y no al corte de los servicios esenciales de luz, agua y gas. También piden un No a la OTAN.