España
espacioseuropeos(9/7/2013)Partidos politicos
De acuerdo con una encuesta elaborada por el Barómetro Global de la Corrupción de Transparencia Internacional, los españoles opinan que los partidos políticos son la institución más corrupta del país. El Congreso de los Diputados (integrado por políticos) y el Poder Judicial no salen nada beneficiados.

Desde hace tiempo la corrupción ocupa los primeros lugares (segundo puesto) de las preocupaciones de los ciudadanos españoles. El primer puesto lo ocupa el desempleo, que en buen parte es consecuencia de la corrupción existente. El 66% de los encuestados cree que el Gobierno de España responde en su gestión a intereses particulares.

La encuesta confirma que en casi todos los países la corrupción ha aumentado desde el año 2011.

El 83% de las personas encuestadas en España opina que los partidos políticos son la institución más corrupta, seguida por la por la Policía (31%) y el poder judicial (24%). Curiosamente, las tres instituciones deberían ser las encargadas de terminar con la corrupción. Pero el fenómeno, aunque algo más asentado en España, es similar en el resto de los países. Un 51% de los encuestados en todo el mundo opina que los partidos políticos son la institución que más problemas plantea a los ciudadanos.

“Dos tercios de los españoles encuestados creen que la corrupción en general ha aumentado en los últimos dos años y esta percepción coincide con una opinión negativa sobre los esfuerzos del Ejecutivo para atajarla. El 66% de los encuestados afirma, de hecho, que el Gobierno trabaja para grupos de presión o intereses particulares”, se afirma en uno de los párrafos de la encuesta.

Datos muy similares han sido los publicados por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), correspondientes al mes de junio. Según el barómetro del CIS, la corrupción sube 1,8 puntos respecto al mes de mayo, situándose en el 32,5%.

Pero ahí están ellos, impertérritos, aguantando lo que les venga encima. Saben que viene el verano, que diluye los problemas como se disuelven los azucarillos en la taza de café. Tan sólo nos queda una esperanza, que Bárcenas continúe suministrando “material” a la prensa. Aunque mucho nos tememos que ni con esas.