Mi Columna
Eugenio Pordomingo (23/9/2008)
Me parece que la semana de la «moda» ha pasado.  Me refiero a  «La Pasarela Cibeles». Ifema ha sido el escenario donde en cinco días ha habido 40 «desfiles» y una cincuentena de diseñadores. Colecciones, modistos, modelos, prensa y mirones y mironas a mansalva  se han dado cita estos días en Madrid.

Dicen que ese sector, creo que se conoce como «alta costura» -debe ser por la estatura de las modelos y los modelos-, genera mucho negocio, aunque nunca he llegado a entender quiénes se ponen esos «trapos» que se lucen, ni dónde los exhiben. Yo, al menos, no los veo por las calles.

Me parece muy bien este tipo de eventos, si es que no cuestan un solo euro a la ciudadanía, que me da la impresión que sí. Que sirve para dar a conocer nuestra moda, nuestros diseños y nuestra fabricación, pues bienvenido sea, pero que lo paguen los interesados. Que se asocien y acoquinen…

Estos días hemos oído como si de un papagayo se tratara, eso de «Cibeles arranca con una nueva imagen para consolidar Madrid como escenario de la moda». Y me parece bien, pero a lo que voy, que yo no estoy para trapitos, aunque sean de altura.

La «Pasarela Cibeles», resulta que ahora se va a llamar «Cibeles Madrid Fashion Week»… Y yo me pregunto, ¿quién ha sido el necio o necia que ha decidido rebautizar este evento?

¿Acaso les da vergüenza expresarse en español? ¿Creen que así van a vender más y mejor su imagen?

Miren, señores de la «Fashion Week», el idioma español es la lengua oficial de casi 500 millones de habitantes, o más, de todo el mundo; el segundo idioma más estudiado en el mundo tras el inglés.

El español es idioma oficial, en Argentina, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay, Venezuela, Guinea Ecuatorial y la RASD (República Árabe Saharaui Democrática).

En Filipinas fue idioma oficial  hasta 1973, aunque ahora se ha anunciado que será de nuevo oficial a partir de este año; y en la isla de Guam el español tuvo carácter oficial hasta el siglo XX. Tanto en Filipinas como en Guam, la labor de Estados Unidos fue fundamental para ese abandono, como también lo han intentado en Puerto Rico.

¿No es de necios dilapidar esta verdadera riqueza cultural? ¿Por qué avergonzarse de nuestro idioma?

No estaría de más que  estos eruditos de la «modernidad» se adentraran en  los Cartularios de Valpuesta, que aún se  conservan en la Iglesia de Santa María de Valpuesta, en Burgos, y en las Glosas Emilianenses, bien guardadas en el Monasterio de Yuso, en San Millán de la Cogolla, en La Rioja…

Abajo la «Cibeles Madrid Fashion Week»; viva «La Pasarela Cibeles».